La Libertad en CristoMuestra
Muertos al pecado
La libertad comienza y termina en la cruz de Cristo. En el Calvario, el castigo por nuestros pecados fue pagado de una vez por todas. Fue allí donde Cristo fue castigado en nuestro lugar para que pudiéramos ser liberados de la deuda del pecado. Pero algo más sucedió en la cruz que influye de igual forma en nuestra libertad. Ese día, no solo se hizo cargo del castigo del pecado, sino también del poder del pecado. La muerte y la resurrección de Cristo marcaron el fin del poder del pecado para controlar al creyente. Así como el pecado no pudo controlar al Hijo de Dios, tampoco puede controlar a quienes que han sido colocados en Cristo por la fe.
Es lamentable que muchos que pudieran estar de acuerdo con la declaración anterior, están lejos de experimentar la libertad. Siguen siendo esclavos de los mismos hábitos y pecados que los atormentaban antes de ser cristianos. No hay victoria sobre el pecado. Hay poco gozo. En consecuencia, tienen pocas razones para seguir luchando. Y así, para muchos creyentes, su lema se convierte en: “Bueno... nadie es perfecto”.
Dios no desea que sigamos viviendo como esclavos del pecado. El mensaje de la cruz es la liberación del pecado, tanto de su castigo como de su poder. Si bien es cierto que siempre seremos tentados, no es verdad que debamos ceder a la tentación. En el momento en que usted fue salvo, recibió una nueva vida: la vida de Cristo. Murió a su antigua vida, una vida dominada por el poder y el atractivo del pecado. Su nueva vida es la misma vida que permitió a Cristo caminar por esta Tierra durante 33 años sin pecar. Es la misma vida que le permitió salir de la tumba sin ser afectado por la muerte. El día que usted nació de nuevo se convirtió en una persona nueva con un potencial nuevo en lo que respecta al pecado y la muerte.
Para que esta realidad histórica y teológica se convierta en realidad, debemos apropiarnos de ella. Es decir, debemos aceptarla como un hecho y actuar en consecuencia. Mientras estemos convencidos de lo contrario, seguiremos viviendo como esclavos.
¿Ha reconocido usted su libertad del poder del pecado? ¿La ha reclamado? ¿O ha estado confiando en sus sentimientos como indicadores de su relación con el pecado? Sus sentimientos le dirán que nada ha cambiado; todo sigue siendo igual.
Pero Dios dice que usted es diferente. Él dice que está muerto al pecado... y los muertos están libres del poder del pecado. ¿A quién elegirá creer hoy?
Escrituras
Acerca de este Plan
¿Es su vida espiritual como una montaña rusa, con muchas más bajadas que subidas? ¿Experimenta más ansiedad que paz, más temor que fe y más fracasos que éxitos? Acompañe al Dr. Charles Stanley a medida que él se enfoca en la libertad en Cristo disponible para todos los creyentes, y en la verdad que, en efecto, nos hace libres.
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Nos gustaría agradecer a In Touch Ministries por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.encontacto.org/planes-de-lectura