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Hábitos Para Comenzar El Año

DÍA 8 DE 9

El hábito de ser agradecidos

“Todo lo que hacemos debe ser resultado de nuestra gratitud a Dios por lo que Él ha hecho por nosotros” (William Arthur Ward).

El hábito de la gratitud se ve muy marcado en la vida de Jesús, según el relato de los evangelios. La gratitud fue un ingrediente esencial de la vida pública del Maestro. Jesús vivió con un espíritu de gratitud para con Su Padre. Permanentemente en sus labios aparecían acciones de gracias a la hora de elevar sus oraciones.

La gratitud de define como el “sentimiento de estima, valoración y reconocimiento que una persona tiene hacia alguien que le ha hecho un favor, o prestado un servicio, o incluso en virtud de algo futuro que se recibirá. La gratitud se puede expresar a través de palabras, de acciones o de gestos, para poder así comunicar que se está agradecido".

Una frase común en los evangelios es que Jesús “habiendo dado gracias” (Mateo 15:36, 26:27, 14:19, Lucas 24:30, 10:21, Juan 11:41).

En diferentes circunstancias, es decir, antes de hacer un milagro, antes de compartir el pan con sus discípulos, al alegrarse después de que sus discípulos tuvieron éxito en la encomienda que les mandó realizar; en diferentes circunstancias, Jesús expresó su gratitud al Padre celestial.

¿Es importante desarrollar el hábito del agradecimiento en nuestras vidas? ¡Por supuesto! ¡Es muy importante!

Muchos pasajes de la Escritura nos invitan a mantener el hábito de ser agradecidos con Dios y con las personas a nuestro alrededor. Puedes leer algunos de los siguientes pasajes de la Biblia, para notar que el agradecimiento debe ser una actitud habitual en la vida del creyente: 1era de Tesalonicenses 5:16-18, Filipenses 4:6-7, 1era. Corintios 15:57, 2da. Tesalonicenses 1:3, 1ero. De Crónicas 16:34, Salmos 9:1, Colosenses 4:2, 2da. Corintios 9:11, Jonás 2:9.

Pueden ser muchos los factores que no nos permiten progresar en el hábito de la gratitud. Aquí mencionaremos solamente algunos de ellos:

• Prisa. La rutina diaria nos exige tanto, que nos es difícil apartar unos momentos al día para contar nuestras bendiciones y agradecerlas.

• Descuido. En ocasiones estamos tan acostumbrados a lo que ya tenemos, que perdemos de vista que son bendiciones que disfrutamos sin darnos cuenta de ellas. Para nosotros puede ser “normal” tener alimento, vestido, techo, y damos por sentado esas bendiciones sin tomarnos el tiempo de agradecer por ellas.

• Enfoque incorrecto. En ocasiones, cuando al fin recibimos alguna petición que hayamos hecho, disfrutamos tanto lo que se nos da, que olvidamos agradecer a Quien nos la dio. De igual forma, si aún no recibimos lo que anhelamos, nuestro enfoque se centra primordialmente en lo que no tenemos aún, que en lo que sí disfrutamos todos los días.

“Sin lugar a dudas, una cualidad muy notable del carácter de Cristo, fue su constante espíritu de gratitud. Al leer sus oraciones, nos sorprende cuánto espacio dedicó a dar gracias en cada una de ellas; también sorprende cómo frecuentemente deseaba alabar por lo que a usted y a mí nos habría amargado. ¿Acaso no tomó la copa, una horrible anticipación simbólica de los próximos eventos llenos de terror y muerte, y aún en esos momentos, dio gracias a Dios?” (A. J. Gossip en su libro “The Edge of the Crowd”).

Algunos consejos prácticos:

• Dar gracias es un hábito, no un sentimiento. Comienza por integrar un par de minutos al día para contar y agradecer sus bendiciones. Requiere un esfuerzo intencional.

• Remplaza quejas por gratitud. Cuando estés a punto de quejarte por alguna situación difícil en tu vida, recuerda que las pruebas traen también diferente tipo de bendición (madurez, templanza, perseverancia, etcétera) (Santiago 1:3-5) Así que bien podemos agradecer a Dios que, aún en las pruebas, “todas lascosas ayudan a bien a quienes amamos a Dios” (Romanos 8:28).

• Intenta agradecer en el comienzo del día. Un nuevo día es motivo suficiente para dar gracias a Dios. Al levantarte, agradecer a Dios cambiará tu perspectiva durante el día. Tu enfoque será de agradecimiento y no de amargura.

• Agradece a quienes son bendición a tu vida. Todos los días recibimos bendición de otros. ¡Todos los días! Aquella persona que nos preparó una taza de café; aquella persona que nos brinda un servicio; colaboradores en nuestra oficina o maestros en nuestra escuela. ¡Todos los días tenemos a alguien a quien agradecer, y el ser agradecidos, sin lugar a dudas fomentará mejores relaciones con quienes nos rodean!

• Pasa tiempo con personas agradecidas. Las actitudes se contagian. Rodéate de personas agradecidas y aléjate, tanto como te sea posible, de personas que tienen el hábito de quejarse, burlarse o criticar a otros.

• ¡Sé creativo! Se puede agradecer a otras personas de mil maneras: a través de un mensaje de voz, una pequeña nota, un chocolate, una palabra de reconocimiento frente a otras personas. Existes muchas maneras de hacer saber a otros que estamos agradecidos con ellos.

El hábito de Jesús de dar gracias nos invita a tomar la decisión diaria de agradecer todo a Dios, y en cualquier circunstancia. También nos motiva a expresar gratitud a quienes nos rodean. ¡Hagamos de la gratitud un hábito en nuestras vidas!

Preguntas para la reflexión

1. ¿Consideras que tienes el hábito de la gratitud, o consideras que es un área de oportunidad en tu vida?

2. ¿Qué tan sencillo te resulta dar gracias a Dios en tus tiempos con Él?

¿Regularmente das gracias a Dios por lo que tienes en tu vida y la vida de los que amas?

3. ¿Acostumbras agradecer a las personas a tu alrededor cuando hacen algo para bendecirte? ¿Con cuánta facilidad agradeces a tu prójimo?

4. Menciona algunos obstáculos que no te permiten agradecer a Dios o a otros ¿Qué acciones prácticas podrías llevar a cabo para mejorar este hábito en tu vida?

Día 7Día 9

Acerca de este Plan

Hábitos Para Comenzar El Año

Tú y yo no somos más que la suma de nuestros hábitos. Piénsalo por un momento. Lo que tú eres el día de hoy es simplemente la suma de los hábitos que te han traído hasta el lugar en donde te encuentras en este momento. En este sencillo plan devocional queremos invitarte a construir buenos hábitos. Hábitos saludables. Hábitos de bendición. Hábitos que te lleven a un futuro mejor, pero, sobre todo, a agradar a Dios con tu manera de vivir.

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Nos gustaría agradecer a Ponlo en práctica por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: instagram.com/ponloenpractica_?igsh=MThueWFocXZyZGp1eQ==