CÁNTICOS DE REFLEXIÓNMuestra

Salmo 23:1-6

Cuando el Rey David expresó estas palabras: "Jehová es mi pastor", lo hizo porque él sabía muy bien todo lo referente a este oficio, debido que en su juventud pastoreó las ovejas de su padre.

Como Pastor Dios nos trata como a Sus ovejitas, nos permite sentir Su abrazo paternal, nos cuida celosamente, ofrece toda Su vida por nosotros, y siendo el buen Pastor Su trabajo es hacer la voluntad del Padre, Su trabajo es llevarte a la santidad, por eso con Él nada nos faltará (v.1) lo tienes todo, tanto el bien terrenal y temporal como el bien espiritual y celestial.

En lugares de delicados pastos me hará descansar; (v.3). Jesús busca el mejor lugar para tu alma, te hace reposar en Su pecho, fuente de amor, gracia y misericordia, te da el gusto más grande de los verdes pastos; el cual destina para sus ovejas más cercanas, aquella comida espiritual que solo se encuentra en Su cuerpo y Su sangre.

Junto a aguas de reposo me pastoreará (v.2b), ya que Su palabra es palabra de vida, paz y bien, te permite entrar en oración al lugar secreto donde encuentras al Padre Celestial, y allí en secreto estás en la fuente infinita y eterna de la Paz, donde el Padre recompensa tu cercanía y te santifica con Su espíritu. Es ahí dónde el alma es confortada (v.3) En tu debilidad te encentrarás siempre con Su fortaleza, no hay nada que no puedas hacer en Aquel que te fortalece física y espiritualmente. Él es la fuente de energía de la vida, en Él encuentras la fortaleza del nuevo día, y también Él repara tus fuerzas cuando la vida se te pone difícil, te sana las llagas del alma y te restaura en el gozo de Su Presencia. Así te guiará por Sus sendas de justicia (v.3b). En Su compañía siempre tendrás la seguridad, pues te alimenta, te conforta, te sostiene, te sana, te tiene siempre cerca de la fuente de la vida y todo esto lo hace en su amor para darte testimonio de la grandeza de Su nombre.

Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo… (v.4). Cuando te asedian las tentaciones, cuando te rodean espíritus malignos, cuando todo se te oscurece, cuando personas lejos de Dios quieren hacerte daño, Él es tu luz y tu salvación. ¿Quién puede hacerte daño si está contigo? Sientes Su poder como un escudo que te protege y fielmente permanece a tu lado para que puedas seguir tranquilo adelante. Su vara y Su cayado te infundirán aliento (v.4b). Su vara está siempre lista para darte corrección, es la luz de Sus mandamientos, y así habla en tu mente y a tu corazón y te reprende del mal que puedas llegar a hacer. Su cayado te rescata y te saca de aquellos sitios profundos de la tentación y el pecado, para que no te vaya a detener la maldad y mantengas siempre un corazón humillado.

Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores... (v.5a). ¡Qué hermoso es el Señor! Quién también como el Buen pastor, siempre está listo para preparar Sus galardones y banquetes aun frente a quienes te afrenten o desprecien (v.5).

En las imágenes bíblicas, el aceite y el vino a menudo representan el gozo y la prosperidad de Dios. El salmista describe tal ungimiento:"Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando…" (v.5b). Has sido elegido por Dios para ser Su oveja y, por lo tanto, para recibir las bendiciones de Dios. El Señor puede hacer grata cualquier situación por la unción de Su Espíritu y los beneficios de Su salvación. Tan grandes y abundantes son las bendiciones de Dios que tu copa se desborda. Las bendiciones se derraman tan grandemente sobre ti que podrías llegar a no tener cuenta de ellas.

Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días (v.6). Su generosidad, Su bondad; es un regalo que da infinitamente y fluye sin cesar compitiendo con Su misericordia que nunca se acaba. Su amor misericordioso te acompañará todos los días de tu vida. Todos quieren tener un hogar y cuando el Señor es tu pastor, descubres que sí tienes un hogar. Tienes un hogar lleno de bondad y amor fiel que Dios muestra todos los días. El concepto de tener un hogar con Dios abarca todo de lo que este cántico nos comparte. Un hogar representa seguridad, provisiones, alegría, descanso y familia. Tenemos todas estas cosas en el Señor. El hogar es dónde uno siempre regresa y debemos hacer nuestro hogar con Dios, Aquel con quien siempre estamos y al que siempre regresamos.

Reflexionemos

Estos son los grandes beneficios que recibimos cuando el Señor es nuestro Pastor. Creo que sería negligente no considerar las palabras de Jesús sobre el tema que se encuentra en Juan 10. En Juan 10:1-18 Jesús declara que Él es el Buen Pastor. Jesús, como buen pastor, daría su vida por Sus ovejas.

Si verdaderamente somos Sus ovejas, nunca seguiremos a un extraño. Nunca seguiremos a otras personas ni iremos por otros caminos porque conocemos la voz del Señor.

Nuestro Señor está tratando de protegernos y nutrirnos a medida que avanzamos en la vida. Simplemente debemos seguir Su voz tal como se nos da en la Palabra de Dios. Obedezcamos al Pastor, recibamos las bendiciones de seguirlo. Como hemos visto, no nos faltará nada de lo que necesitemos mientras lo seguimos. Por causa de Su gran amor te está prometida la casa Su Padre, Jesús es ese camino que te lleva a la casa celestial en la Gloria de tu reino.

Espero que hayas escuchado la voz del pastor a través no solo del Salmo 23 sino de cada uno de estos cánticos de reflexión. Toda la alabanza, el agradecimiento, el honor, el poder, el reino y la gloria sean en todo momento para mi Señor.

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