El propósito eterno del Padre en el HijoMuestra

La iglesia, la cosecha de Cristo

¡La iglesia no es algo, es alguien! Podríamos decir que la iglesia es Cristo en su resurrección. Al que vio Juan no fue a Jesús de Nazaret, el que tuvo creyentes, discípulos y multitudes, pero no tuvo cuerpo (iglesia). ¿Cuándo vino la iglesia? Cuando el grano de trigo, que expuesto, ahora tiene reproducción de cosecha. ¿Qué es la iglesia? Cristo cosechado en muchos, pero en una expresión de la misma vida, que es el grano de trigo. ¿Qué tiene ahora?, cosecha, en otras palabras, la iglesia es Cristo expresada en un cuerpo que son muchos. 

El Señor dijo: si yo fuera levantado, a todos atraeré a mí mismo, era porque Él iba a establecer ese pueblo que engendraría un día, y en un momento, estarían todos incorporados. Jesús llevó a juicio a todo lo que se oponía a ese mundo, y en la cruz sentenció el pecado, la muerte y todo lo que era de descendencia adánica, de esa forma esa naturaleza despareció, y emerge un nuevo hombre, Cristo formado en nosotros, en un mismo Espíritu, Padre, Señor y una sola fe por su resurrección. ¿Quién es ese nuevo hombre?, la iglesia formada en Cristo, ahora Él está expresado en un cuerpo resucitado. La iglesia está cambiando, no en un andamiaje adánico, sino en un nuevo hombre que se está manifestando. 

La primera carta a los corintios dice: Tal vez alguien pregunte: ¿Cómo resucitarán los muertos? ¿Con qué clase de cuerpo vendrán? ¡Qué tontería! Lo que tú siembras no cobra vida a menos que muera. No plantas el cuerpo que luego ha de nacer, sino que siembras una simple semilla de trigo o de otro grano.

Luego, la misma carta dice: Así sucederá también con la resurrección de los muertos. Lo que se siembra en corrupción resucita en incorrupción. Se siembra en deshonra y se resucita en gloria. Se siembra en debilidad, se resucita en poder. Se siembra un cuerpo natural, se resucita un cuerpo espiritual. El primer hombre Adán, fue hecho en alma viviente, pero el último en Espíritu vivificante, el que da la vida; sin embargo, el espiritual no es primero, sino el natural. 

Pablo responde a esta iglesia de Corintio, que no tiene una explicación correcta de la resurrección, los ubica que Cristo es el postrer Adán, el cual se llevó toda esa naturaleza que no es de Él, sino adánica, la cual contenía muerte, y todo aquello que fue expresado en un orden incorrecto. Ahora aparece un nuevo hombre, ¿quién es ese nuevo hombre?, la iglesia, son muchos que la expresan, pero en una sola forma de vida, que es Cristo.