Segunda Palabra

FAVOR-GRACIA

Yo sólo tengo una hija. Podríamos decir que, es sencillo y un gran alivio no tener que responder a la tan capciosa e incómoda pregunta sobre el hijo favorito. En más de una ocasión he presenciado conversaciones donde los padres que tienen más de un hijo declaran que no tienen un hijo favorito entre ellos. Algunas personas aseguran que, puede que sí lo tengan, como un secreto muy guardado.

Entonces, en cierto sentido, me parece que la respuesta para esos padres es: "Todos son favoritos".

Al explorar las Siete Palabras del Nacimiento, ya está surgiendo una verdad clave. Si fueras la única persona perdida y rota en la tierra, Él habría enviado a Su único Hijo para traerte la primera palabra: Salvación.

Y esta segunda palabra revela que tú eres el favorito de Dios. En un milagro que sólo un Dios omnisciente, todopoderoso y todo amoroso podría llevar a cabo, todos somos sus favoritos. Todos somos el foco de su asombrosa gracia.

La única pregunta que queda es si este don charis será recibido o no. ¿Su mensaje de gracia para ti será recibido con fe como lo fue en el caso de María?

Cuando le comunicaron la asombrosa noticia del favor de Dios sobre ella, ella sólo tenía una pregunta: "¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón?" (Lucas 1:34). Nótese que ella preguntó "cómo", no "si". En otras palabras, ella no dudó de que lo que el ángel había dicho sucedería. Ella sólo se preguntaba cómo sucedería, dado que ella era una virgen soltera. El ángel le respondió explicando cómo podía suceder algo así: Respondiendo el ángel, le dijo: "El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso también el Santo Ser que nacerá será llamado Hijo de Dios. Y tu parienta Elisabet también ha concebido un hijo en su vejez; y ya está en el sexto mes para la que llamaban estéril. Porque nada hay imposible para Dios" (Lucas 1:35-37)

Dios es tan misericordioso. Para tranquilizarla, el ángel también le hace saber a María que se están produciendo embarazos milagrosos en este momento histórico y trascendental. Su respuesta es de fe y completa disposición a colaborar con Dios para cumplir sus planes y propósitos en la tierra: María dijo: "¡He aquí la sierva del Señor! Hágase en mí conforme a tu palabra" (Lucas 1:38).

En otras palabras: "¡Está bien! ¡Soy tu hija! ¡Recibo de todo corazón lo que quieras hacer a través de mí, Señor!".

Dios también quiere colaborar contigo. Dios habló de esto claramente a través del nacimiento de su Hijo. Habló de salvación. Y luego habló de gracia. Esta es la época de la gracia. Y eso significa que eres uno de los favoritos de Dios.