Disfrutando De La MaternidadEjemplo

Dejando un legado de amor
por Tara Davis

Querida amiga, sé que te esfuerzas mucho por ser la madre que tus hijos necesitan, la que Dios te ha llamado a ser. Entre los líos, las peleas y la vida alocada, tal vez tu fuego y tu pasión por este viaje se apaguen un poco. A mí también. Nuestro tiempo en esta tierra es tan corto, apenas un vapor (Santiago 4:14). Y nuestro tiempo criando a estos preciosos pequeños es aún más fugaz. ¡Oh, cómo quiero que mis hijos recuerden haber visto a Cristo en mí! Una mujer sabia me dijo una vez que comenzara con el resultado final en mente. Hermanas, debemos hacer un plan para el legado que queremos dejar y mantener el rumbo mientras permitimos que Dios nos convierta en las mujeres que Él desea que seamos.

¿Has estado simplemente surfeando las olas de la maternidad? Querida hermana, ¡no es demasiado tarde para escribir intencionalmente tu historia y permitir que Cristo escriba la suya a través de ti! El Salmo 90:12 le pide al Señor: “Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría”. ¿Quién quieres ser durante los días que te quedan? ¡Comienza a caminar más intencionalmente en el llamado de Dios para ti! ¡Deja que Cristo te transforme en las manos y los pies de Su amor! Él te convertirá en la mujer amable, paciente y fiel que anhelas ser si simplemente eliges entregarte y ser renovada en Él.

Cuando caminas intencionalmente con Él, Él brillará a través de ti, iluminando la oscuridad que te rodea (2 Corintios 4:6-7). Como hija del Rey, ya no eres tú quien vive, sino Cristo quien vive en ti (Gálatas 2:20). ¡Comienza a caminar en esa dirección hoy mismo! ¡Tus hijos verán tu fidelidad a Jesús y eso se convertirá en el andamiaje sobre el que construirán sus propias vidas!

El legado que dejamos es nuestra ofrenda al Señor que continúa mucho después de nuestro último aliento en la tierra. ¿Estás eligiendo amar hoy, amiga mía? ¿Estás mostrando misericordia y bondad a tus hijos? ¿Estás personificando el carácter de Cristo? Amemos con el propósito y la abnegación de los que habla 1 Corintios 13. ¡Este es el verano para someter tu vida al Señor y permitirle dejar un legado de amor a través de ti!

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