Salmo 19: La suficiencia de la palabra de DiosEjemplo

La suficiencia de la palabra de Dios - Parte IV

• Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón (Salmo 19: 8a).

“Esta palabra enfatiza la autoridad directa de lo que es dicho… el derecho de dar órdenes” (Kidner). Los mandamientos representan la autoridad que liga. No son opcionales; no son una simple sugerencia.

Los mandamientos son los preceptos y estatutos de Dios. Se definen como una regla que establece un principio o como una instrucción que se entiende como regla. Los mandamientos actúan como los principios divinos para la vida espiritual. Son las leyes del reino de Dios, y deben ser obedecidas por sus súbditos.

“La palabra de Dios y los mandamientos contenidos en Ella son rectos. Son moralmente rectos, son por práctica rectos, y universalmente son rectos. Son rectos porque son la revelación de un Dios que es santo, verdadero, y siempre recto” (Enduring Word). Los mandamientos de Dios no son arbitrarios, sino que están basados en su naturaleza divina (santa, recta, justa, fiel, verídica), lo que hace que sean un modelo para nuestra vida. “Porque recta es la palabra del Señor, y toda su obra se hace con verdad.." (Salmo 33:4).

Al ser los mandamientos rectos (correcto, bueno), opuesto a torcido, enderezan la mente y conducta del hombre; mostrando lo que el hombre debe ser, tanto dentro como fuera. La verdad bíblica es tan suficiente que incluso hace que el corazón temeroso o acongojado se alegre. Proporciona la verdadera felicidad y satisfacción duradera, que sólo Dios puede dar.

Cuando seguimos los mandamientos de Dios, estamos viviendo conforme a su voluntad, lo que nos puede traer la paz, la alegría y la satisfacción que solo se pueden encontrar en una verdadera relación con Él.

La palabra recto tiene el significado de derecho, plano, llano, adecuado, apropiado, correcto. El significado de recto es que la Escritura no es recta en el sentido de opuesto a incorrecta. Es un término hebreo que significa la dirección o el camino correcto. Establece el camino correcto a recorrer, por el cual debemos andar.

Muchas personas hoy están angustiadas o abatidas porque carecen de dirección y propósito. La mayoría busca respuestas en las fuentes equivocadas. La palabra de Dios no solamente provee la luz para nuestro camino (Salmo 119:105), sino que establece la ruta seguro enfrente nuestro.