LA VISIÓN DE DIOS PARA MI VIDA

Probablemente hayas escuchado frases como: “¡Ten una visión para tu vida!” o “Haz lo que amas y no trabajarás ni un solo día de tu vida”. Pero en un mundo donde todos buscan una dirección, te pregunto esto:

¿Cuáles son tus verdaderas prioridades?

¿Hacia dónde te diriges?

¿Qué conversaciones significativas necesitas tener?

¿Estás aprovechando al máximo el tiempo que Jesús te ha dado?

No se trata solo de tu visión para tu vida. En cambio, se trata del viaje personal de descubrimiento que todo ser humano debería emprender: ¿Para qué fui creado? Esta es una pregunta que personas de todas las edades, desde los 15 hasta los 50 años y más, se encuentran haciéndose en diferentes etapas de la vida.

“La visión de Dios es lo que realmente dirige tu vida. Sin ella, corres el riesgo de estancarte y vagar sin rumbo”.

Hay dos días muy importantes en tu vida: el día en que naciste y el día en que descubriste por qué naciste. Para quienes han entregado su vida a Cristo, es esencial buscar el propósito para el cual Dios los ha elegido. ¿A qué llamado dedicarás el resto de tu vida? ¿Por qué causa se esforzará por expandir el reino de Dios?

Paso de acción: Tómate un tiempo hoy para reflexionar y responder estas preguntas:

¿Cuáles son mis prioridades?

¿Qué conversaciones necesito tener?

¿Hacia dónde me está guiando Dios?

Oremos por claridad y dirección, pidiéndole a Dios que revele Su visión para su vida y lo ayude a alinear sus pasos con Su propósito. Deja que Él guíe tu camino mientras buscas vivir el llamado que Él ha puesto en tu corazón.