NT25 AYUNOMuestra

Día 6 - Arabella Barnum-Bobb, Au Pair + Voluntaria del Ministerio de Mujeres en UPPERROOM

Lectura de hoy: Lucas 7-16

"Hija, tu fe te ha sanado; Vete en paz" (Lucas 8:48).

“Al oírlo, Jesús quedó asombrado. Se dirigió a la multitud que lo seguía y dijo: «Les digo, ¡no he visto una fe como está en todo Israel!»” (‭‭Lucas‬ ‭7‬:‭9‬ ).

"Tu fe te ha salvado; Vete en paz" (Lucas 7:50).

Entretejido a lo largo de estos capítulos hay un hermoso hilo de fe. Ya sea que Jesús llamara a los discípulos a seguirlo y dejarlo todo atrás, María derramando su costoso perfume o el centurión creyendo en la curación de su siervo, cada historia revela una expresión única de fe. Es un hermoso viaje para cada uno de ellos.

La fe trajo sanidad. La fe allanó el camino para el avance. A través de la fe, hubo un extravagante intercambio de amor. La fe trajo cercanía.

La fe de estas personas nos invita a tener una mayor fe en nuestras propias vidas. ¿Tengo la misma fe que la mujer con flujo de sangre, que simplemente quería tocar el borde del manto de Jesús? Con solo un toque, supo que sería sanada - simplemente por la persona a la que estaba tocando. ¿Qué pasaría si realmente supiéramos quién es nuestro Padre? ¿Cómo actuaríamos?

—¿Dónde está su fe? (Lucas 8:25).

"¡Cuánto más a vosotros os vestirá, oh hombres de poca fe!" (Lucas 12:28).

Hay un contraste en estas historias donde Jesús desafía a los que tienen "poca fe". La fe es la evidencia de las cosas que no se ven. Esos pasajes de las Escrituras nos recuerdan la importancia de la fe, especialmente cuando nuestras circunstancias parecen imposibles.

Oración:

Jesús, te doy gracias por el don de la fe. Despierta una nueva fe en nosotros para creer en Ti para movernos en lo imposible en cada área de nuestras vidas. Revélanos hoy los lugares en nuestros corazones donde necesitamos una fe fresca. Entregamos nuestras vidas de nuevo al Dador de la fe: Jesús.