NT25 AYUNOMuestra

Día 5 - Kane Killen, Asociado de las Instalaciones en UPPERROOM

Lectura de hoy: Marcos 13-Lucas 6

Me encanta la forma en que aterriza esta parte del texto. Comenzamos con el relato de Marcos sobre el mensaje de Jesús sobre el fin de los tiempos y terminamos con el relato de Lucas sobre el Sermón del Monte. En ambos escritos de este sermón, Jesús establece sistemáticamente que Su Reino es totalmente diferente al reino del mundo. Es un reino de los pobres donde el hecho de que todos los hombres hablen bien de ti significa que probablemente estás haciendo algo mal. La forma en que tratas a tus enemigos revela más sobre tu corazón que la forma en que tratas a tus amigos. Todos estos buenos frutos que crecen naturalmente en la vida de los justos, Jesús dice audazmente que ninguna de estas expresiones externas importa cuando llega el temblor y el juicio (Lucas 6:46-49). En Lucas 6:46, Jesús hace la pregunta: "¿Por qué ustedes me llaman: “Señor, Señor”, y no hacen lo que Yo digo?" El relato más detallado de Mateo de este versículo dice:

No todo el que me llama: “¡Señor, Señor!” entrará en el reino del cielo. Sólo entrarán aquellos que verdaderamente hacen la voluntad de mi Padre que está en el cielo. El día del juicio, muchos me dirán: “¡Señor, Señor! Profetizamos en tu nombre, expulsamos demonios en tu nombre e hicimos muchos milagros en tu nombre”. Pero yo les responderé: “Nunca los conocí. Aléjense de mí, ustedes, que violan las leyes de Dios” (‭‭Mateo‬ ‭7‬:‭21‬-‭23‬ ‭NTV‬‬).

‬Así que dos versículos más adelante, cuando Él está estableciendo que las casas construidas sobre cualquier otra cosa que no sea la Roca no resistirán tiempos de prueba, Él se está refiriendo directamente a esta dinámica del reino. Los buenos frutos solo sobreviven al temblor cuando nacen de conocerlo a Él y ser conocidos por Él. La tentación no ha cambiado desde el principio, ¿buscarás el fruto o escogerás conocer y ser conocido por Aquel que hizo el Jardín? El versículo 47 nos da tres pasos sobre cómo edificar una vida sobre la roca y producir frutos duraderos.

Venid a Mí: En vuestra hora de necesidad, acércate valientemente al trono de la Gracia y comparte todo con Él, especialmente las cosas que sientes que no puedes.

Escuchen Mis palabras: Esperen Su respuesta y amen la Biblia y la voz del Espíritu Santo.

Actúa en consecuencia: Deja que Su Palabra te transforme y produzca fruto en su tiempo perfecto.

Oración: Gracias, Jesús, porque eres la piedra principal. En la hora del temblor, que mi vida sea edificada sobre este buen fundamento. Dame la humildad para esperar y perdurar. Despierta mi amor por Tu voz hoy.