Viviendo Por La PalabraMuestra
Vivir Por La Palabra
Los hijos de Dios vivimos por su Espíritu; nuestro camino es direccionado por el Poder de su Palabra, marcando el rumbo que nos lleva a ver cumplida su voluntad en nuestra vida en el Nombre de Jesús, viviendo según su identidad y su carácter.
La Palabra de nuestro Padre Eterno, es la fuente de la sabiduría que necesitamos para vivir en este mundo terrenal; para testificar de la obra redentora que obró Jesús en favor nuestro y vivir en la gloria de su Nombre.
Cuando estamos viviendo por la Palabra se nos ha de notar; por lo que hablamos, por la manera en que actuamos, por la forma en que nos relacionamos con los demás; en general, por la manera en que vivimos.
Todo cuanto vivimos está bajo el radar de Dios; aun cuando nos equivocamos y le fallamos, aun cuando podamos desviarnos en algunas ocasiones de su voluntad no dejamos de estar bajo su control; todo es usado por Él, según el buen propósito que ha determinado cumplir en nosotros.
Cuando realmente vivimos por su Palabra, no hay nada de lo que vivimos que pueda escapar al propósito por el cual hemos sido salvos a través de Jesucristo; sí o sí, la regeneración que debemos vivir conforme a su Nombre se cumplirá en nosotros.
Al vivir por la Palabra, estamos en proceso de renovación y perfeccionamiento constante a a través del Espíritu de Dios; cada día, cada experiencia, cada circunstancia, se convierte en una oportunidad con propósito para adorar a nuestro Padre en el Nombre de Jesús.
Escrituras
Acerca de este Plan
Leer, estudiar y meditar la Palabra de Dios es muy diferente a vivirla. En especial cuando son aquellos momentos de prueba en los que la enseñanza teórica es pasada por la lupa de la práctica, donde su fuego abrasador nos regenera y perfecciona conforme a Jesús, comprobando que realmente la Palabra está produciendo vida en nosotros. ¡Qué bendecidos somos!
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Nos gustaría agradecer a Marysela Ocampo O. por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.facebook.com/confiadosenJesucristo