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Fe que realmente cree

En Josué 3, después de vagar por el desierto durante 40 años, a los israelitas se les dice que crucen el río Jordán y dejen que los sacerdotes que llevan el Arca de la Alianza les guíen. Los israelitas, que no eran conocidos por su gran obediencia, tal vez se sintieron un poco aprensivos. El Jordán puede tener hasta 100 pies de ancho y hasta 10 pies de profundidad. Era tiempo de cosecha y el río estaba crecido hasta el punto de desbordarse. Si lograban cruzar, la ciudad fortificada de Jericó los esperaba al otro lado. Sí, apuesto a que tenían sus dudas.

Dios los conocía demasiado bien. Y como suele hacer, hizo una provisión. Él haría crecer su fe... justo ante sus ojos. A los sacerdotes se les dijo que sostuvieran el Arca sobre sus cabezas y entraran al Jordán. No había orillas de suave pendiente ni lugares para realizar un descenso gradual. Cuando entraste al Jordán, saliste de la orilla y ya estabas dentro. A la altura del pecho.

La verdadera fe es así. Decidimos sumergirnos en las profundidades, confiando en que Dios mantendrá nuestras cabezas fuera del agua. Piense en su décimo cumpleaños. Esperabas recibir un regalo de cumpleaños, pero no sabías cuál podría ser. En los términos más simples, la fe es como ese regalo de cumpleaños. Creemos que Dios nos guiará, nos sostendrá y nos rescatará... simplemente no sabemos cómo lo hará.

Los israelitas vieron que las aguas se partían y cruzaron sobre tierra seca. No salieron del agua igual que cuando entraron. Hicieron una elección. Eligieron creer.

Entonces, ¿te atreverás a adentrarte en las profundidades? ¿Te atreverás a creer que Dios te ama lo suficiente como para venir corriendo si lo necesitas? ¿Tendrás fe? ¿Tendrás fe que realmente cree?

La fe es la sustancia de lo que se espera y la evidencia de lo que no se ve (Hebreos 11:1).

Reflexión:

¿Qué situación enfentas que requiere que tengas muy buena fe?

¿Cómo cambia tu forma de vivir tener fe como los israelitas?

Debbie Sanders

Reclutaradora de Admisiones en SNU