Investigando a JesúsMuestra

La marca de un seguidor de Jesús tiene que ver con cómo tratar a los que son diferentes a nosotros.

Imagina por un segundo que tu amigo está trabajando como mesero en un restaurante local. Sabes que está trabajando en una noche en particular, y tú y algunos otros deciden salir y sentarse en su sección. Pero cuando llegas allí, ves que esa noche le está yendo fatal a tu amigo. El lugar tiene poco personal. Los invitados no están contentos. Tu amigo no está teniendo una buena noche en el trabajo. Aunque seas un cliente que paga, ¿qué le dirías a tu amigo?

“¡No te preocupes por nosotros! Estamos bien. Vuelve y cuídanos cuando puedas. Podemos esperar. Ningún problema".

Y te sentirías bien al hacer eso. Estás haciendo algo bueno por tu amigo. Le estás dando un respiro. Pero según el Dr. Richard Beck, el autor del libro Unclean, no ha habido ninguna demostración moral significativa de tu parte. Como dijo Jesús en Su Sermón del Monte, parte del cual aparece en Lucas 6, incluso los paganos hacen eso. Todos cuidamos de nuestra propia gente.

Una marca de los seguidores de Jesús es cómo pensamos de y tratamos a las personas que no son nuestra gente. Es cuando ofrecemos la misma hospitalidad a quienes se ven diferentes, votan de manera diferente, le van a un equipo diferente, o viven de manera diferente a nosotros. Es cuando realmente vemos a esas personas tan valiosas como cualquier otra persona.

Como dijo Jesús, ¡Amen a sus enemigos! Háganles bien. Presten sin esperar nada a cambio. Entonces su recompensa del cielo será grande, y se estarán comportando verdaderamente como hijos del Altísimo, pues él es bondadoso con los que son desagradecidos y perversos. Deben ser compasivos, así como su Padre es compasivo (Lucas 6:35–36 NTV).

“Padre Celestial, ayúdame a ver a las personas como tú las ves. Y ayúdame a tratarlos como tú a través Cristo me has tratado a mí, amén”.

Lee el Capítulo 8.