Eres ReyMuestra

Vivamos en el reino

El Rey, Rey de toda autoridad

Sí soberano, eres tú Jesús

¿Cómo identificaríamos que vivimos en el reino de Dios? ¿Acaso lo hallaremos en un mapa? Jesús nos dio la respuesta, él dijo que era necesario nacer de nuevo para ver el reino. Debemos entender que el reino está en nosotros, pues él mismo es el reino.

El Rey, de toda autoridad, estableció que se debe tener experiencias de tres realidades, estas son: ver, entrar y heredar. Con el nuevo nacimiento vemos cómo el Espíritu Santo habita en nosotros, lo sabemos por la fe. Entramos cuando nos esforzamos por entender con diligencia la Palabra de verdad. Solo los valientes entienden y viven con ganas de ser parte de todo lo que Cristo hizo por nosotros. Heredamos un reino incorruptible y se hace realidad cuando lo podemos expresar en nuestras vidas.

Dios es soberano en todo y debemos expresar esa soberanía en cada hogar, con cada uno de los miembros. Hacer acuerdos y saber hablar lo que es justo dentro de la casa, eso es heredar el reino. En el área de finanzas es lo mismo: dar con liberalidad, hablar de su abundancia; en lo laboral, ser ese canal de bendición que fluye, propiciar el dialogo, generar soluciones. El propósito de Dios debe ser nuestra prioridad, los herederos saben cuál es su verdadera herencia y no escatiman nada para demostrar su posición en el reino.

Asimismo, en el área emocional, el gobierno de Dios debe ser absoluto, las emociones nos hacen malas jugadas, en un momento estamos en la cima y al segundo en el abismo más profundo, las emociones son un carrusel sin control. Sin embargo, los hijos del Rey permanecemos firmes sin dejarnos llevar por vientos contrarios, no importa lo que los sentidos nos digan, ellos no nos gobiernan. Por tal razón debemos sacar de nuestras vidas todo aquello que nos impide ver la luz de la verdad, agradecer por todo lo que se nos ha dado y con prontitud obedecer en todo a nuestro Padre y Rey, para con gran júbilo expresar dulcemente: «¡Abba! ¡Padre!».  

Oremos

Amado Rey de gloria, te alabamos y te damos gracias por tanta generosidad hacia nosotros. Nos viste cuando estábamos muertos y nos diste vida. Nos compraste con gran precio y nos hiciste tus hijos. Nos das la oportunidad de decirte Padre y vivir para ti. ¡Cómo no agradecer tanto amor! ¡Cómo no agradecer tanta abundancia! Alabamos tu nombre. Amén.

Este plan devocional se basó en la canción Eres Rey de Coalo Zamorano. Si deseas ver el video de la canción, sigue este enlace https://linktr.ee/CoaloZamorano