Una Iglesia Feliz y SaludableMuestra

Responsabilidad: Sobrelleven los unos las cargas de los otros Nadie tiene que decirle a un pelotón de soldados de la marina que se necesitan mutuamente. Desde el primer día de entrenamiento básico, los reclutas son entrenados para cuidarse unos a otros y depender unos de otros. Como sabe, una congregación es también una banda de hermanos (y hermanas). A veces usted tendrá que apoyarse en otra persona o apoyar a otro: cuando haya un diagnóstico de cáncer, pérdida de empleo, o nido vacío, y en otras ocasiones, alguien va a necesitar apoyarse en usted. La Biblia dice: “Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo” (Gálatas 6:2). Cuando ve a alguien que está luchando y le ofrece ayuda, cumple una de las razones por las que Dios lo ha puesto en esta tierra; él lo diseñó para ser útil, para ser amable, para que refleje su amor a las personas que hay en el mundo que lo rodea. Por eso está aquí todavía; por eso no está ya en el cielo. Una de las cosas positivas que producen las dificultades en el entrenamiento de los soldados es que les ayuda a saber que son capaces de hacer grandes cosas.