Una Iglesia Feliz y SaludableMuestra

Responsabilidad: Acepte la ayuda de sus amigos Siempre me sorprende lo aplicables que son los principios básicos de los A. A. para una diversidad de problemas de la vida que van más allá del alcoholismo. Muchas veces, los consejeros de los A. A. se tienen que esforzar mucho para lograr que las personas den el primer paso y admitan que tienen un problema severo. A veces se necesitan intervenciones muy grandes. Otro principio básico es el siguiente: un alcohólico no puede girar en torno a su propia vida, siempre necesita ayuda. Para mí eso es algo muy difícil de aprender; cuando estoy pasando por alguna dificultad, muchas veces soy demasiado orgulloso para aceptar ayuda. Quizás usted haya pensado alguna vez: “¡No!, solo tengo que resistir un poco más; voy a estar bien. Puedo con esto; esto no es nada. He pasado por cosas peores”. La Biblia dice: “Escucha el consejo y acepta la corrección: así serás sabio en tu vejez” (Proverbios 19:20). Le diré esto: en mi propia vida ya me han enderezado un buen número de veces. Felizmente, Dios hizo que yo escuchara lo que tenían que decirme los hermanos y las hermanas, y así pusieron mi cerebro en una senda mejor. Pero no he terminado aún, lo necesito a usted, no solo para que ore por mí, sino también para que me sostenga en el buen camino.También necesito que usted tenga un espíritu humilde y esté dispuesto a permitir que la gente que lo rodea le diga también un par de cosas. Su familia y su iglesia son un sistema de compañeros que ha diseñado Dios para mantenerlo en su camino.