Pasos hacia ShalomMuestra

Establezca la paz en tu hogar

Hollywood ha puesto el listón muy alto cuando se trata de “felices para siempre”. Crecemos con nociones poco realistas de cómo es el matrimonio y cómo debe ser todo lo que sigue. Incluso si sabemos en nuestra cabeza que esta es una realidad falsa, es una idea a la que, aún así, nos aferramos con nuestro corazón. La verdad es que nuestros cónyuges e hijos no serán perfectos todo el tiempo. No seremos perfectos todo el tiempo. Nadie lo es.  

Aunque “felices para siempre” es un mito, eso no significa que no podamos tener shalom en nuestros hogares. Es fundamental, pero debemos estar dispuestos a trabajar por ello.

Aarón, el primer Sumo Sacerdote de Israel, ocupaba el segundo lugar después de Moisés en términos de autoridad entre los israelitas. Sin embargo, incluso a Aarón se le permitió hacer cosas que ni siquiera Moisés podía hacer. Como Sumo Sacerdote, sólo él podía entrar al Lugar Santísimo y realizar ciertos rituales que a nadie más se les permitía hacer.  

¿Y a qué se dedicaba diariamente este hombre santísimo? En lugar de gobernar sobre el pueblo, estuvo entre ellos, estableciendo la paz entre ellos.

Entre todos los hombres y mujeres de la Biblia, Aarón era conocido por sus habilidades para “hacer la paz”. Constantemente alternaba entre maridos y esposas, trabajando para restaurar la paz en relaciones problemáticas. De hecho, muchos niños recibieron el nombre de Aarón durante la época en que vivió, ¡ya que fue sólo gracias a sus esfuerzos que estos niños llegaron a existir!

Aarón entendió que la paz, especialmente en el hogar, era de suma importancia y por eso esta fue la obra santa con la que decidió ocuparse.

A menudo pasamos por alto la importancia de la paz en nuestros hogares o con nuestra familia y amigos. Creemos que podemos apañárnoslas sin ello. Sin embargo, como entendió Aaron, sólo cuando podamos tener paz en nuestros hogares podremos esperar tener paz dentro de nosotros mismos y en nuestro mundo.  

Los niños modelan lo que ven, y si ven un hogar de paz, es mucho más probable que traten a los demás con la misma bondad, perdón y respeto que vieron modelado para ellos. En última instancia, si no podemos superar nuestras diferencias con aquellos que amamos, ¿cómo podremos llegar a un acuerdo con aquellos que tienen menos conexión con nosotros? Nuestros hogares pueden ser una fuente de paz en el mundo, o Dios no lo permita, contribuir a la falta de armonía que es tan evidente hoy en nuestro mundo.  

Además, una vez que entendemos el significado completo de shalom, podemos apreciar que cuando hay shalom en el hogar, los miembros de la familia no sólo son tolerados; son apreciados. El foco se centra en lo bueno de cada persona y en cómo cada uno completa la familia, en lugar de en lo que falta. Lo mismo es verdad en nuestras relaciones con amigos e incluso con extraños.  

Con el tiempo, cuando nos enfocamos en lo bueno de los demás, sacaremos a relucir lo bueno que hay en ellos, y eso es algo de lo que todos podemos beneficiarnos.

Paso 5: Trae shalom a tu hogar. Piensa en cada persona más cercana a ti, ya sea un miembro de tu familia con quien vives, alguien con quien trabajas o con quien interactúa más a menudo. ¿Qué es lo que más aprecias de esa persona? ¡Enfócate en lo bueno de ellos y hazles saber! Ofrece gratitud, respeto, perdón y bondad a todos. Si bien no siempre es fácil crear un hogar pacífico, nunca dejes de intentarlo.