Consideración del otro.

La hospitalidad es la consideración hacia los demás que nos permite acoger a Dios en persona, demostrando nuestro amor por el otro. Todas las personas han sido creadas a imagen de Dios, con las mismas necesidades y anhelos humanos. Cuando nos acercamos a los demás con compasión y apertura para escuchar su experiencia, comprenderemos mejor sus necesidades.

Un huésped puede llegar cansado, hambriento o a veces herido. Restablecerlos con comida y descanso es un deber. Vemos la respuesta de Abraham a los huéspedes desconocidos en Génesis 18 y la respuesta del Buen Samaritano al forastero herido en la parábola que Jesús compartió con sus discípulos en Lucas 10. Acoger y responder a las necesidades de los demás es un mandato específico de Dios y una instrucción que Jesús dejó muy clara a sus primeros discípulos (Mateo 10:40-42).

En la práctica, ofrecer hospitalidad no siempre resulta fácil. Pero, como seguidores de Jesús, debemos superar las dificultades. Podemos mostrarnos reacios a abrir nuestras puertas y acoger a quienes nos han hecho daño o nos han decepcionado. Cuando la hospitalidad nos resulta difícil, podemos pedir a Dios que nos ayude a cumplir con este deber, a sustituir nuestra indecisión por convicción y nuestro juicio por compasión. En nuestro contexto, los congoleños son verdaderamente hospitalarios no sólo con sus iguales, sino también con los pobres o desfavorecidos y con los extranjeros.

La hospitalidad es una actitud que nos enseña a abrir el corazón a los demás sin refunfuñar ni quejarnos, a recibirlos con consideración, a escucharlos y a proporcionarles alojamiento y comida sin esperar recompensa.

Cuando limitamos nuestra hospitalidad, nos privamos de la alegría de Dios.

Para reflexionar:

¿Hasta qué punto estoy dispuesto a abrir mi corazón a los demás y ofrecerles hospitalidad gratuitamente?

Una oración para hoy:

Amoroso Padre Celestial, despierta mi corazón a tu amor para que pueda acoger a los demás en mi vida, dondequiera que esté y con quienquiera que me encuentre hoy. Amén.