Depresión. Reclama tu vida y hazlo de Su mano.Sample
Él no se sorprende
“Señor, tú me examinas, tú me conoces. Sabes cuándo me siento y cuándo me levanto; aun a la distancia me lees el pensamiento. Mis trajines y descansos los conoces; todos mis caminos te son familiares”. Salmo 139:1-2
Dios no está sorprendido de nuestras debilidades. Cuando saca nuestra alma de la ruina, Él nos da una vida nueva, y al dárnosla, lo hace a nuestra medida. Es decir, Él tiene en cuenta nuestro pasado, experiencias y conocimiento previo, para llevarnos al mismo fin: ser más como Él. Pero, esto lo hace a un ritmo y manera de acuerdo con quiénes somos y tomando en cuenta las limitaciones con las que llegamos a Sus pies. Nuestro caminar con Cristo nunca se verá igual al de otros creyentes porque cada alma trae diferentes heridas que Él quiere sanar.
Antes de experimentar la Paz de Jesús que lo sobrepasa todo, yo sufrí la destrucción de mi familia a causa del alcoholismo de mi padre. Esta pena profunda hizo que, cuando conocí ese primer toque liberador y sanador de Dios, fuera la experiencia más inolvidable de mi vida.
Sin embargo, esto fue solo el comienzo del camino a la sanidad.
Tomó varios años de ir a la iglesia, orar, hablar con otros, creerle a Dios constantemente y tomar terapia para desenredar mi alma para que sintiera completa sanidad.
Esta aventura de transformación continúa a lo largo de nuestra vida con Él y se puede ver como valles y montes que, según la Biblia, son caminos “familiares” para Él. Nada lo sorprende. Dios seguirá tejiendo la obra de arte que empezó en nosotros el día que le hicimos Rey de nuestra vida.
Medita y habla con Él:
Dios, en los versículos de hoy puedo ver que Tú eres...
Alma, hoy te digo...
Estoy agradecido por...
Hoy decido confiar en Ti en esto...
About this Plan
¿Estás cansado de sentir tristeza constante y querer aislarte aunque tienes todo de Dios? ¿De salir de la iglesia con ganas de conquistar el mundo para que dos días después ya no tengas esperanza? Si es así, este Plan de 10 días es para ti. A través de verdades bíblicas y de un entendimiento más profundo de tu alma (intelecto, emociones y voluntad), podrás detener la vergüenza por sentir depresión y los juicios contra ti mismo por sentirte un “mal cristiano”, mientras invitas a Jesús a guiarte en el camino de la sanidad emocional que tanto anhelas.
More