«¿Dónde Está Tu Tesoro?»Muestra

«¿Dónde está tu tesoro?»

Addison Leach, era un profesor universitario. Conoció a dos jóvenes mujeres quienes se convirtieron en seguidoras de Jesús. Ellas fueron a sus padres y dijeron, «nos convertimos en cristianas, y queremos ser misioneras». Cada uno de sus padres dijeron, «Ahora queridas, ustedes tienen una experiencia religiosa. Cuán maravilloso. Pero necesitan algo de seguridad. Antes que viajen para tener la experiencia misionera, lo que está bien, queremos que tengan su grado de Maestría en la universidad. Queremos que tengan un trabajo o dos, así que puedan practicar su carrera en el campo profesional. Y queremos que tengan algo de dinero en el banco, para tener algo de seguridad». 

Las mujeres fueron con el Dr. Leach y preguntaron, «¿Qué podemos decir sobre eso?» A lo que él replicó, «Aquí está lo que yo respondería a sus padres. Díganles que estamos en una pequeña bola de roca, que gira a través del espacio. Se llama Tierra, y quién sabe si vamos a colisionar contra algo. Pero aún si no es así, algún día, bajo cada uno de nosotros se abrirá una trampa y todos caeremos por allí. Al final de tu vida, una trampa se abrirá debajo de ti, y se caerán de la pequeña bola de roca. Esta puede ser los brazos eternos o nada después de todo. ¿Y tú piensas que un grado de máster va a darme alguna seguridad?»

Esta historia toca el tema, ¿es nuestra seguridad el dinero o es Dios? El dinero es poderoso. Él revela tu corazón. Jesús no dice donde esté tu corazón, allí está tu tesoro. Él no dice tu dinero seguirá tu corazón. En cambio, Él sorprende con la verdad opuesta, «donde esté tu tesoro, allí esta tu corazón también». El dinero es poderoso. Si tú inviertes en Dios y su reino, podrá empujar tu corazón con él. Amarás más a Dios. Sin embargo, si colocas todo tu dinero en acumularlo y acapararlo, entonces tu dinero empujará tu corazón lejos de Dios. Amarás menos a Dios. 

Tal vez piensas que la salida hacia una vida espiritual era orar o leer la Biblia, servir a la comunidad, o congregarte. Todo esto es absolutamente vital, pero la salida de la vida espiritual es tu dinero. Allí hay algo sobre el dinero, está atado a tu corazón en alguna manera profunda. Muestra dónde está tu corazón, dónde estás realmente, y dónde está tu confianza en realidad.