El Poder De PerdonarEjemplo

El poder de pasar un duelo correctamente

El perdón siempre implica duelo.

Probablemente hayas oído hablar de las cinco etapas del duelo: negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Como se llaman etapas, es fácil pensar que el duelo es un proceso lineal. Etapa 1, 2, 3... Clic. Sí, ¡ya lo superé!

Pero el duelo no es así, es más como una espiral. El dolor tiende a repetirse, puede que te despiertes días, meses o años más tarde y te invada una oleada de tristeza y enojo tan intensos como en el momento en que te hirieron. Esto no significa que no hayas perdonado de verdad, sólo significa que necesitas recordarte a ti mismo que elegiste perdonar.

La buena noticia es que la espiral será cada vez más amplia y los episodios se distanciarán cada vez más. Si la espiral vuelve de nuevo, no te sientas culpable, es normal, simplemente recuérdate que elegiste perdonar. Con el tiempo llegarás a un punto en el que el recuerdo del suceso sólo te traerá paz.

El perdón es obediencia a Dios pero también es el camino para desbloquear la plenitud de nuestra libertad en Cristo. Si eliges perdonar, puedes estar seguro de que has sido liberado. Puede que tardes un poco en sentirte libre, pero debes saber esto: Eres libre.

Ya no tienes que ser retenido por la herida, el dolor o la vergüenza. Jesús te perdonó, tú perdonaste a quienes te lastimaron y ahora estás caminando por la senda para llegar a ser plenamente tú - la persona que Dios dice que ya eres en Cristo.

Este plan de lectura ha sido adaptado del libro Plenamente Tú: Liberando el potencial de todo lo que eres realmente de Joël Malm