Regocíjate- Celebrando El Tiempo De AdvientoMuestra
Temor a Dios
Leer: Lucas 1:49-50; Lucas 12:1-8; Hebreos 12:25-29
EOAO: Lucas 1:50
“y su misericordia permanece de generación en generación
para los que le temen!".
En el Texto
A lo largo de su canción, María mostró una profunda reverencia por Dios. Lamentablemente, no hay mucho temor de Dios en nuestro mundo hoy en día. Mucha gente simplemente sonríe cuando escucha acerca de los mandamientos de Dios. En sus mentes, Dios, si existe, pero no sería tan quisquilloso como para castigar a la gente por su desobediencia. Después de todo, nadie es perfecto y todos hacemos lo más que podemos. Algunos dirían: “Realmente no somos tan malos y Dios es muy comprensivo”. Hay mucha confianza en la bondad de las personas y una gran minimización de la santidad de Dios.
Temer a Dios significa respetarlo profundamente y escuchar atentamente lo que Él dice. Significa tomar en serio Sus advertencias sobre el pecado y el infierno. Significa saber que debido a que Dios es santo, poderoso y justo, mereceríamos una destrucción segura si viviéramos en rebelión contra Él. Sólo podemos temer a Dios cuando vemos cómo es Él. Debemos saber que podemos llegar a conocerlo cada vez más a través de la Biblia.
Cuanto más claramente veamos la santidad de Dios, más desarrollaremos una reverencia adecuada hacia Él. También nos veremos a nosotros mismos y a nuestro pecado más claramente a la luz de su santidad y su carácter. Esto nos hará entristecernos al darnos cuenta de que no podemos presentarnos ante un Dios justo con nuestra propia justicia. El temor de Dios producirá humildad y un corazón sensible.
María sabía que este Dios temible estaba lleno de misericordia y compasión cuando veía a la gente en su pecado y desesperación. Hoy sabemos lo que María en ese momento no sabía; el único lugar seguro del castigo de Dios es la cruz, el lugar donde Jesús, Dios mismo, fue castigado por nuestros pecados. Aquí es donde acudimos en busca de perdón y refugio. Aquí ya no tememos a Dios, sino que nos regocijamos en su misericordia. Dios, en su bondad, nos ha salvado de su propia ira. Y, como María, perderemos el miedo a los demás, a sus opiniones y juicios, porque sólo tememos a Dios.
Oración
Padre celestial, ayúdame a temerte más a ti y menos a los demás. Amén.
Acerca de este Plan
¿Te has preguntado alguna vez por qué nos alegramos y entonamos tantos cánticos durante el Adviento? Todos sabemos por qué cantamos en Navidad. ¡Dios mismo se nos ha acercado! Dejando el cielo, vino a nuestro mundo perdido por amor a nosotros. Los primeros cantos sobre el nacimiento de nuestro Salvador se recogen en el Evangelio de Lucas y fueron entonados por judíos del siglo I: María, Zacarías, Simeón; así como un impresionante coro angélico, cuyo sonido debió de ser de otro mundo.
More
Nos gustaría agradecer a Love God Greatly - Spanish por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://spanish.lovegodgreatly.com