Tiempo de RenovaciónMuestra

"¡NADIE ME TOMA EN CUENTA!"

de ¡Aliento!

“Doy gracias a mi Dios siempre…” (Filipenses 1:3).

En Estados Unidos cada año se festeja el Día de Acción de Gracias. Durante esa jornada, se le dan gracias a Dios por la cosecha obtenida como provisión de Dios para subsistir. Creo que es muy importante ser una persona agradecida. Pero es muy frustrante cuando sentimos que nadie toma en cuenta nuestro servicio al Señor. Todos sabemos que estamos trabajando para el Señor, pero es bueno que, por lo menos, nuestros líderes sepan qué estamos haciendo. Sentir que no hay aprecio por nuestro ministerio es algo fuerte y cuesta aceptar que, aparentemente, no valoran nuestro esfuerzo. Nos preguntamos si estamos haciendo algo que valga la pena y si en realidad hará alguna diferencia en las personas.

Todos estos pensamientos y sentimientos pueden afectarnos mucho. Veamos qué podemos hacer.

1. Re-enfocarnos. Hebreos 12:2 dice: "Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios". ¿Están nuestros ojos puestos en Jesús, a quien servimos? Filipenses 1 comienza de esta manera: "Pablo y Timoteo, siervos de Jesucristo…”. Recuerda que eres un siervo de Cristo Jesús.

2. Buscar nuestra satisfacción en el Señor y no en los hombres. Filipenses 1:1 sigue con ".. a todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos...". Pablo le dio gracias a Dios por todos, pero su satisfacción estaba en Cristo Jesús. Jeremías 1745 dice: "Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová". Los hombres nos pueden fallar, pero nuestro gozo en el servicio viene del Señor y no de ellos.

3. Descansar en Dios sabiendo que estamos haciendo una buena obra y no podemos caer en el error de escuchar las palabras de desánimo del enemigo. Filipenses 1:2 dice: "Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo". Nuestra confianza está en Dios, que nos da gracia y paz en todo momento. Así que, no te preocupes si nadie ve lo que haces o no reconocen tu trabajo, Dios te tiene en cuenta y está a tu favor.

¿Por qué no te detienes a reflexionar en lo que Dios ha hecho y en todas sus bendiciones en tu vida? No seas una persona amargada por las cosas que te han pasado, sino sé una persona agradecida con Dios. Vive agradecido y con gozo. No te olvides de que nuestra meta es escuchar las palabras como las del Señor que leemos en Lucas 19:17: ".. Está bien, buen siervo; por cuanto en lo poco has sido fiel, tendrás autoridad sobre diez ciudades". Filipenses 1:6 dice: "Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo". Estamos en el camino.

Para reflexionar:

¿Te afecta que otros no reconozcan tu ministerio?

¿En quién buscas satisfacción? ¿Puedes reflexionar en todo lo que Dios te ha bendecido hasta aquí?

Oración:

Señor, ayúdame a tener presente que nada se escapa de tu mirada. Amén.