Amor romántico

Lo que pensabas que era un amor romántico en las fases iniciales de atracción no puede compararse con lo que experimentas en esta fase. Esto va mucho más allá de las hormonas, las sustancias químicas en el cerebro y lucir bien para ver a la persona que te gusta. En la sexta fase, tu amor ha pasado por el fuego de la adversidad y no ha sido bonito. Las cosas que eran impuras e impías se han quemado mientras todo lo verdadero y santo ha permanecido. Lo que queda es puro y refinado. Han peleado grandes batallas espirituales para llegar a donde están ahora. No ha sido fácil, pero ha valido la pena. Conoces a tu cónyuge y tu cónyuge te conoce por quién tú eres – las mejores partes, tus defectos, tus fracasos, tus éxitos. Y luego de todo lo que han pasado juntos, con los ojos bien abiertos, tú amas más profundamente que nunca. Este es el ápice – esto es el amor romántico.

Muchos se dan por vencidos antes de llegar a este punto. Dios quiere usar tu testimonio para animar a otros que están a unos pasos detrás de ti en su relación. Hay algunas partes feas en tu historia, quizás partes de las cuales te avergüences. Esto puede hacer que compartir tu testimonio sea intimidante. Pero cada vez que le dices a alguien lo que Dios ha hecho por ti, rompes el control de la vergüenza en tu vida. Alguien necesita escuchar cómo peleaste contra la falta de perdón, el resentimiento y el dolor para llegar al lugar de una relación fortalecida en el que te encuentras ahora.

ROMPE LA LISTA de razones por las que no puedes compartir tu historia de lo que Dios ha hecho en tu relación. Esperanza y libertad son liberadas cuando compartes tu historia. Tus palabras de aliento pueden marcar la diferencia entre que alguien se dé por vencido en su relación o que siga adelante.