Momentum: Mantener El Agarre En La PalabraMuestra

«Revisa frecuentemente lo que Dios ha hecho en ti»

Cuando afianzas tus dedos en un puño, el pulgar es la parte que ayuda a mantener tu agarre. «Momentum», no es solamente mantener el “status quo”, también es mantener y fortalecer tu agarre en la Palabra a través de tu vida. Muchos comienzan, pero solo unos pocos terminan bien. 

La última noche de un programa de entrenamiento de discipulado, el líder del grupo advirtió, que debíamos terminar bien, y marcó esta declaración, «Algunos de ustedes no estarán caminando con Dios dentro de diez años».

Nunca olvidaré sus palabras, todavía me desafían a mantener mi agarre en las disciplinas espirituales que empecé a practicar ese verano, hace más de 30 años. Estas son las cosas que hago que me ayudan a permanecer en esta jornada de vida, de atesorar la Palabra de Dios en mi corazón.

Comencé el diario de oración y memorización de versículos hace más de 20 años, empecé a llevar un registro de lo que Dios está haciendo en mi corazón y mi vida a través de su Palabra memorizada. Mantén un diario donde escribas frecuentemente, registra lo que Dios te ha mostrado en su Palabra y cómo ha probado su Palabra en tu vida. Recientemente tomé tiempo de leer de nuevo mi último diario completo, y con un resaltador, marqué los tiempo en que Dios habló, o se movió en mi vida claramente a través de esas escrituras atesoradas en mi corazón.  Así que, vuelve atrás ocasionalmente y lee tu diario para recordar lo que Él ha hecho en tu vida y como un guardia de seguridad te mantendrá firme para no alejarte de ella.

Intencionalmente lleva una vida disciplinada. Después de no mucho tiempo de hacer una decisión diaria de memorizar las escrituras, fue un acuerdo definido, intencionalmente lo hice parte de mi rutina diaria.

¡Hacemos únicamente las cosas que queremos hacer! Avanza atesorar la Palabra de Dios en tu corazón. Es un acto de la voluntad y no hecho por emoción. ¡Solo hazlo!

Desarrolla fervor espiritual. Hace unos años atrás, comencé a escribir en mi diario de oración esta oración: “Señor, dame pasión por tu Palabra, tu manera, tu ministerio, y tu voluntad”. ¡Es asombrosa la manera que Dios contestó a esa oración! Fervor es pasión y entusiasmo con propósito. Se desarrolló fervor espiritual y pasión por atesorar la Palabra de Dios en mi corazón mientras seguía ciertos principios, que veremos en el devocional del día de mañana.