El niño que es SeñorMuestra

¿Quién era Teófilo?

La extensa investigación de Lucas que culminó en su Evangelio fue motivada por su preocupación por un hombre llamado Teófilo y otros como él. Este amigo posiblemente aún no era cristiano, pero quería saber la verdad sobre Jesús. Así que, tras investigar a fondo, Lucas escribió para su amigo los hechos sobre Cristo (el Evangelio de Lucas) y el cristianismo primitivo (el libro de los Hechos) para que “sepas la verdad precisa acerca de las cosas que te han sido enseñadas” (Lucas 1:4). Esto convierte a Lucas en el escritor más prolífico del Nuevo Testamento. En total, sus escritos representan más partes del Nuevo Testamento que los de cualquier otro autor, incluidos Pablo y Juan. Lucas es también el libro más largo del Nuevo Testamento, con 1,151 versículos (586 son las propias palabras de Jesús), mientras que Mateo tiene 1,071 versículos, Marcos 678 y Juan 869.

Los gastos de los viajes de Lucas tuvieron que ser inmensos. Cualquier investigador puede dar fe de los costos que implica un proyecto de larga duración que incluye viajes, alojamiento y, posiblemente, personal de apoyo durante semanas o meses, o posiblemente años. ¿Cómo pagó Lucas todos estos gastos? Teófilo fue el hombre que financió la investigación de Lucas y, por tanto, pagó su viaje, salario y gastos. Se le menciona al principio tanto de Lucas como de los Hechos, lo que se solía hacer en aquella época para honrar a quienes financiaban un proyecto, del mismo modo que el nombre de un generoso donante suele aparecer en un cartel en un edificio en nuestros días. El título de Teófilo, “excelentísimo”, se usaba para referirse a la nobleza y probablemente indica que era un exitoso dirigente empresarial y/o político. Este título también se utiliza para los gobernadores en Hechos (por ejemplo, Félix y Festo en 23:26; 24:2; 26:25).

El nombre de Teófilo significa “amante de Dios”, un título apropiado porque el libro de Lucas es para cualquiera que ame a Dios. Ambrosio, el padre de la Iglesia del siglo IV, lo dice así: “Así pues, el Evangelio fue escrito para Teófilo, es decir, para aquel a quien Dios ama. Si amas a Dios, entonces fue escrito para ti”[2]. Lucas es para todos los que aman a Dios, y su objetivo es animar a los demás a ser amantes de Dios.

Reflexión:

¿Eres una persona generosa? ¿Hay algún ministerio o persona a la que deberías dar, pero no lo haces?

[2] Just, A. A. (Ed.). (2005). Luke [Lucas] (p. 4). Downers Grove, IL: InterVarsity Press.