Reinventando Mi CarácterMuestra

Heridas Sanadas

Me encanta sentirme espiritualmente acogida, porque realmente empecé este ayuno para estar preparada a lo que Dios quería hablarme. A que Dios tocara mi vida y me transformara. Definitivamente tuve días que fui quebrantada y confrontada por Dios.

Sí, así como los discípulos, o sea cada uno de nosotros tenemos algunas veces esa actitud de alejarnos de Jesús, y las tenemos por una condición de nuestro pensamiento, que es el querer que las cosas se hagan de acuerdo a nuestra voluntad. A lo que pensamos, a lo que queremos, y eso nos aleja; y al alejarnos nos sentimos tristes y débiles. Pero, fijate en esta alentadora promesa de Jesús que hoy es importante recordar: "Estas cosas les he hablado para que en mí tengan paz. En el mundo tendrán aflicción; pero confíen, yo he vencido al mundo".

Pero te invito a que sigamos unidos con Dios. Pero Dios Padre nunca dejó a Jesús, como lo dice el versículo, y una cosa aprendo en ello, y es que “así fueron más fuertes”. “Juntos”. El Padre y el Hijo. Tal vez de ahí nos ha mostrado que “sí” debemos permanecer. “Juntos como Iglesia”, así seremos más fuertes, porque en esa victoria que ellos tuvieron, yo ahora “soy más fuerte”.

No fue una victoria mía. Fue una victoria de quien me salvó: de Jesús. A quien debo de conocer, pero sobre todo en quién debo de confiar. Él me ha amado por eso soportó el dolor, usando Su poder para salvarme, en lugar de salvarse Él. Quedándose para pagar el precio que yo debía, tomándolo como Su deuda. Se entregó para rescatarme. Para rescatarte. Ha sanado mis heridas. Antes estaba enferma, ahora soy sana en Él. Antes estaba cautiva, ahora soy libre por Él.

Terminamos así 21 días de ayuno con esta convicción: de Creer en Un Dios Poderoso. Confía en Jesús. Confía en un Dios que mandó a Jesús para que nosotros seamos salvos.. y lo dijo así Él mismo: "Pero confíen, yo he vencido al mundo".

Gracias porque te pusiste en la brecha junto con nosotros durante 21 días. Es de beneficio personal, porque Dios ha hablado a cada uno de acuerdo con lo que necesitábamos. Ora para que persistas en lo que te habló y avanza para ser y tener un corazón conforme a lo que Él espera de ti. Hoy concluimos este devocional y ayuno.

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