Reinventando Mi CarácterMuestra

¡Sé fuerte y valiente!

La ventaja que tenemos, es que la Biblia nos habla de nuestros problemas y situaciones, por lo que en ella encontramos la verdad que nos ayuda a reconfigurar nuestra mente. Sí que puedo analizar, ¿qué es lo que la Biblia dice con respecto al miedo?

¿Qué te hace tener miedo en este momento? Uno de los detonantes que tiene mi mente para tener miedo es la situación económica. Es como si le diera alas al miedo. Pienso en la situación económica que puedo estar teniendo, entonces mi mente dice: ¿Qué será de nosotros? ¿Cómo le vamos a hacer? ¿Sabía que esto podía volver a pasar? Y en mi vejez, ¿qué haré? En concreto puedo decir que ninguna de esas preguntas están mal pensar, si lo haces para planea. Pero, cuando tu pensamiento está siendo dirigido por el miedo y el terror de las cosas por venir, entonces, sí estamos mal parados.

El miedo nos estorba para pensar de manera correcta, la adrenalina que corre por nuestro cuerpo, nos mantiene suficientemente en alerta, llevando la sangre a nuestras extremidades, listas para correr o lanzar patadas y golpes con los brazos. Es la manera en la que enfrentamos la situación. Eso exactamente, no es lo que nos ayuda a tomar las decisiones correctas, ni siquiera es lo que nos permite tranquilizarnos.

Es una defensa de nuestro cuerpo, si, es útil en circunstancias adversas, sí. Pero si lo dejamos libre, lleva nuestros pensamientos por caminos de derrota. Por eso debemos identificar qué es lo que provoca o está provocando miedo en nuestro corazón. ¿Por qué esto es peligroso? Porque definitivamente caemos en un bache, por eso necesitamos crear una trinchera con la verdad de Dios.

Dios lo que hizo es crearnos un nuevo camino que nos lleve a tener alas de paz y de generosidad. No habrá nada que me siga asediando el resto de mis días, porque la verdad de Dios es clara: no tengo un espíritu que me esclaviza al miedo, tengo el Espíritu de Dios y tengo una mente que me recuerda ¡Sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas.

Ora a Dios para que te muestre cuál es la situación que detona tu miedo. Pídele que escudriñe tu corazón, para que conozcas tus temores y que te dé la fuerza y valentía que necesitas.