La Magia de la NavidadMuestra

Cristo: no es un apellido

Nombre. Apellido. En nuestra sociedad occidental, estamos acostumbrados a escribir el nombre de una persona de esta forma.

Mientras nos acercamos a la Navidad, es importante saber que los padres de Jesús no eran José y María Cristo. Para gran disgusto de mis hijos (quienes me lo han preguntado mucho), Cristo no es el apellido de Jesús. Cristo es una parte igualmente importante de Su nombre, un nombre que es único para Él.

Jesús era completamente hombre, una persona con emociones, apetitos y necesidades, como tú y yo. Si alguna vez te has sentido frustrado tratando de conectarte con Dios, debes saber que Él hizo todo lo posible por relacionarse contigo. Jesús de Nazaret fue y es la ofrenda más empática de Dios.

Cristo, sin embargo, es igualmente importante. La palabra "Cristo" viene del término griego "Christos", que significa "El Elegido" o "El Ungido". Una y otra vez en el Nuevo Testamento se insinuaba la llegada de un Mesías, o un Cristo que no sería ungido por un rey terrenal. En cambio, Aquel que vendría sería ungido por el Rey celestial, y por lo tanto, sería el Cristo.

Como lees en1 Crónicas 17:11:14, este Cristo profetizado vendría de Dios a establecer Su reino y establecería Su trono para siempre.

De acuerdo a Isaías 9:6, Él sería: “Consejero admirable, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz". Aunque no vino como pensábamos, vino: En amor, envuelto en pañales, se presentó.

Cuando se hizo hombre, comenzó a invitar a otros a seguirle. Y nos invita a nosotros también. En Juan 1:41, Andrés, uno de sus primeros seguidores, se lo dijo muy bien a su hermano Simón:

“Hemos encontrado al Mesías (es decir, el Cristo)".

Mientras esperamos la Navidad, recuerda que no estamos esperando simplemente la celebración del nacimiento de un bebé. Celebramos al Cristo, el cumplimiento de la promesa de Dios, la seguridad de que la Palabra de Dios es buena, y la certeza de que todavía se puede confiar en Él. Agradece a Dios hoy por Jesús, el hombre, y por Cristo, el Salvador, enviado por Dios. Después de todo, como dijo Andrés, ¡hemos encontrado al Mesías (es decir, el Cristo)!

Clay Scroggins
Pastor Principal