Biblia en Un Año - ÉxodoMuestra

¿Alguna vez has dicho algo que realmente no quisiste decir?

Todos.

Llega a ser demasiado tarde retirar la palabra mal dicha, así como evitar el pecado cometido, lamentablemente.

Pero......

¿Acaso te encuentras en esos lugares en este momento donde erraste de un extremo al otro?

Entonces, te encuentras en el momento en el cual Aarón quiso que "la tierra se lo comiera” por obedecer la solicitud de un pueblo desocupado.

Mientras Moisés está delante de Dios viendo Su Presencia y maravillas, el resto de la nación se encuentra sin propósito, aburrido y desprovisto de una relación con el Señor.

Aarón es el ejemplo de que las personas pueden decir cosas terribles unos de otros, aun cuando haya sido elegido y consagrado sacerdote, pastor, diácono, líder, apóstol, etc., si no se está en 24/7 en comunión con Dios, se corre el riesgo de cometer pecado al hablar mal de otros y dándole la oportunidad al diablo de causar discordia:

El mal ejemplo de este hombre debería hacernos parar y pensar antes de denigrar a otra persona y/o iglesia.

Pero en el otro extremo, encontramos a Moisés, un hombre conocedor del corazón de Dios solicitando nueva oportunidad para aquellos que fallaron (esto es el resultado de la convivencia diaria con el Señor, por cierto).

No sólo la Escritura menciona que somos lo que pensamos:

Sino también advierte que el mayor contacto con las personas “no convenidas”, generará el deslizar de las personas de fe.

“Las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres” 1Corintios15:33.

¡Determinante y claramente entendible! Y aun cuando se trata de una verdad que libera y a la vez brinda la oportunidad de conservar la salud y la estabilidad emocional, porque aprendes a elegir sabiamente, no deja de ser tajante.

¡Cuánta claridad encontramos en la Escritura!

Aarón debió saber que el mayor pecado que el pueblo tenía era su falta de relación con Dios, por lo tanto TODA solicitud de ellos iba a ser contraria a lo establecido por el Señor.

Sé que es muy fuerte lo que menciono en el recuadro, pero el diablo no es un caballero, no temas ofenderlo, no puedes herir sus sentimientos, tampoco imagines que vas a estropear su ego.