Antiguo Testamento con Fermín IVMuestra

Los Levitas habían sido apartados para servir en el tabernáculo, y una vez más se nos recuerda que le pertenecen a Dios. Él mismo dice: “Son míos.” Pero era necesario ser purificados para comenzar a servir; era necesario el sacrificio de expiación por ellos. 

Y comenzaban a servir a los 25 años de edad. Si eres joven, lo mejor es que apartes tu vida para servir al Señor y comiences ya, pronto. Entrega tu vida a Dios y vive para Dios.

Por primera vez celebran la pascua, un recordatorio de cómo los primogénitos de Israel habían sido librados de la muerte a través de la muerte de un cordero sin mancha y la sangre en la puerta. 

Siempre debemos recordar el sacrificio de nuestro Señor; la cruz donde nuestro pecado fue pagado y se nos dio libertad. 

El pueblo, ya organizado, está listo para avanzar. Cuando Dios avanzaba, ellos avanzaban; y cuando Dios se detenía, ellos se detenían. Qué increíble es recibir dirección de Dios para nuestra vida; pero aún más, obedecer a su dirección. Pídele a Dios que te muestre su dirección y también pídele que te fortalezca para obedecerle.