Discerniendo la profecía y las señales de los últimos tiemposMuestra

Cómo prepararse para los últimos tiempos

No son tiempos en los que debamos depender de nuestra propia fuerza, inteligencia, conocimiento o habilidades naturales. La única manera de estar preparados para lo que está pasando y para lo que vendrá es mantener tres posiciones vitales: (1) “velar y orar”, (2) perseverar y (3) comprometerse a amar y obedecer a Dios. Sólo de esta manera nuestros ojos espirituales podrán ver lo que viene y nuestros espíritus estarán listos para recibir la sabiduría del Espíritu Santo para guiarnos a un buen fin en medio de cualquier tormenta de los últimos tiempos.

Velar y orar

Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuándo será el tiempo.… Y lo que a vosotros digo, a todos lo digo: Velad. (Marcos 13:33, 37)

Acuérdate, pues, de lo que has recibido y oído; y guárdalo, y arrepiéntete. Pues si no velas, vendré sobre ti como ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti. (Apocalipsis 3:3)

A lo largo de Su ministerio, Jesús repitió la advertencia “velar y orar”. Velar significa estar alerta, despierto, vigilante —todo el tiempo— para que podamos orar sobre lo que percibimos en el ámbito espiritual. No podemos orar adecuadamente si tenemos un espíritu dormido. Es decir, si oramos, pero nuestro espíritu no está velando, nuestras oraciones se basarán en nuestra vista y entendimiento naturales, y serán ineficaces. Sólo si estamos velando, sólo si nuestro espíritu está alerta, atento y conectado al Espíritu de Dios, podremos mantener nuestras lámparas llenas de aceite y estar listos cuando el novio venga por Su novia.

Perseverar

Jesús dijo: “Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo” (Mateo 24:13). En otras palabras, “El que persevere en su fe en Mí será salvo”. Jesús nos dice que en medio de todas las señales de los últimos tiempos que están ocurriendo, no podemos dejarnos derrotar o desviar del camino que el Señor nos ha marcado hasta que Él regrese. Debemos perseverar hasta el final.

En la mente de Dios, no importa dónde estuvimos el año pasado o incluso la semana pasada. Lo que importa es dónde estamos hoy. “Con vuestra paciencia ganaréis vuestras almas” (Lucas 21:19). Pudimos haber sido fieles durante toda nuestra vida hasta este momento, pero si no seguimos en Dios hoy, si dejamos de perseverar, no “ganaremos nuestras almas”. Esta es una carrera de resistencia; no se trata tanto de cómo empezamos, ni siquiera de lo rápido que corremos, sino más bien de la forma cómo terminamos. ¡Mantengamos el rumbo! 

A medida que concluyan los últimos tiempos, veremos más calamidades que rompen récords tanto en la naturaleza como en la economía mundial. Habrá más violencia y apostasía. ¡Todo se intensificará! El hombre natural tratará de explicar estos eventos a través de la ciencia y la lógica, pero debemos entender que las señales se fortalecerán y serán más frecuentes debido a los movimientos espirituales que están marcando los últimos tiempos. Lo más importante es que usted esté preparado para perseverar hasta el final.

Comprometerse a amar y obedecer a Dios

Para ser parte del remanente de Dios, necesitamos reverenciar y amar al Señor y tener una relación cercana con Él. Tenemos que estar despiertos, alertas y obedientes, vigilando y orando. Debemos estar llenos del Espíritu, de la presencia de Dios y de la gloria y el poder celestiales. El remanente de Dios está comprometido, es santo, apasionado y fuerte —viviendo justamente y adorando a Dios en Espíritu y verdad—. Es una iglesia madura que es íntima con el Espíritu de Dios.

Por lo tanto, ¡velemos y oremos para no caer en tentación y, sobre todo, para estar atentos a la venida de Cristo! Seamos parte del remanente sin “mancha ni arruga” (Efesios 5:27), completamente vestidos (vea Apocalipsis 3:18), con nuestras lámparas continuamente llenas de aceite (vea Mateo 25:1–13). ¡Perseveremos hasta el final, hasta que alcancemos la plenitud de nuestra salvación! ¡Cristo viene pronto!

Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús. (Apocalipsis 22:20)

¡Esperamos que este plan le haya animado con la esperanza de la aparición de Jesús y le haya movido a velar y orar! Explore otros recursos en https://www.espanolwh.com/book-authors/guillermo-maldonado/