[El propósito eterno] Manifestación del propósito eternoMuestra

Predestinados conforme al propósito

La segunda expresión que Pablo utiliza en la carta a los Efesios 1:11 nos dice que «fuimos predestinados conforme al propósito». Para quienes el misterio les ha sido revelado, saben que han sido predestinados. Pablo habla de algo que trasciende a lo que Dios se había propuesto, no era una determinación de qué pasa con cada uno de manera individual en el planeta, sino de qué va a hacer Dios con todos los individuos que creen en lo que Él ha dicho en su Hijo.

Hay cosas que Dios hace contigo que exceden tu voluntad humana porque están metidas, sumergidas, encapsuladas, conforme al propósito, y el propósito está relacionado con su Hijo; por eso, aquel que comenzó la buena obra en nosotros la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Esa revelación ilumina tu espíritu y tu entendimiento, se alumbra de repente, es un saber que no puedes poner en palabras. Algo dentro de ti decía que eres predestinado para algo mayor y esto es parte del proceso por el cual Dios te pasa para sacarte al otro lado mejor de lo que venías. En el propósito, esto tiene un objetivo fundamental. 

Pablo decía que fuimos predestinados. El fin fue preparado antes de que comenzáramos cada generación. Habrá hombres y mujeres que podrán decir: «yo soy predestinado»., no porque unos se salvan y otros se pierden; yo soy predestinado porque en Dios estaba escogido en Cristo desde antes de la fundación del mundo.

Revisemos la palabra «predestinación». Nos predestinó en amor, no fue un capricho de un día donde Dios dijo: «tengo ganas de mandar gente para el infierno hoy». No. Nos predestinó en amor. Y no es que Dios tiene amor, y que ese día se levantó amoroso como nosotros. No. En esencia es imposible que el amor no ame. La característica fundamental del amor es que necesita expresión. 

Aunque hemos sido hechos participantes de la naturaleza divina, estamos siendo perfeccionados en ese amor. Amor que es contrario a todo lo que vivimos. Es contra cultura, es contra naturaleza, pero Dios no cambia. Cuando el sujeto cambia, parece ser que la intensidad de su amor sube a mayores niveles de expresión. A aquel sujeto al cual Dios amó y se reveló, Dios se determinó a hacerlo su hijo; a aquel sujeto que desobedeció cuando Dios le entregó todo por gracia, Dios le dice que no se va a perder, que Él mismo descenderá a buscarlo, Él mismo se encargará, Él mismo estaré entre ellos y Él mismo lo regresará a Él. Esta predestinación es por amor.

Dios, en amor, nos predestina conforme a su propósito. El objetivo de este fin es marcar, constituir, manifestar, a través de los que Él predestinó para ser a la imagen de su Hijo.