Matrimonios a prueba de todoMuestra

Las buenas noticias cambian al hombre

Las palabras tienen un poder divino para producir realidades, por eso la oración es tan poderosa, porque la oración no es otra cosa que declarar los propósitos de Dios. Puedes orar por años por tu cónyuge: «Que mi cónyuge cambie», pero cuando hablas con él solo dices palabras negativas, entonces no sirve. Pero si entendieras que la oración es hablar lo que Dios dice, entonces dejarías de estar de rodillas orando una cosa y haciendo otra diferente. Si oraras declarándole los propósitos de Dios, eso produciría más a que estés dos horas de rodillas orando por esa persona. Da por hecho que esa persona es lo que Dios dice.

Nuestras palabras, al igual que la oración, son declaraciones que alinean las cosas a la voluntad de Dios. Santiago en el capítulo tres de su carta habla de una persona que no ha puesto un filtro en sus palabras, que no ha aprendido a cortar las palabras que son negativas. Si de tu boca salen dos cosas, hoy Dios te ha habilitado para que cortes las palabras de maldición y que solamente salgan palabras de bendición. Es una decisión y es una elección hacer. Hoy eliges hablar correctamente y poner un filtro en tu boca para producir realidades positivas en tu matrimonio.

Debo aprender a hablar para que lo negativo que está en mí sea cambiado por lo positivo. Mis palabras van a producir una realidad, no solamente a las personas a las que les hablo sino en mi persona. El estado del matrimonio de cada uno, en muchos sentidos, es el resultado de las palabras que hemos proclamado sobre nuestra pareja. Debes decidir dejar de hablar cosas negativas acerca de tu pareja, que no salgan más de tu boca, y entender cómo produce Dios su obra. Por eso el mensaje de Dios se llama Buenas Noticias, porque lo que cambia al hombre no son las malas noticias. 

Lo que cambia al hombre es escuchar buenas noticias, lo que cambia al matrimonio son las buenas palabras. Las Buenas Noticias cambian vidas, por lo tanto, tenemos que atrevernos a hablar buenas noticias en nuestro matrimonio; las buenas noticias que cambian nuestro interior, nuestra familia, nuestro trabajo y nuestro mundo. Tenemos que aprender a hablar como Dios, aprender a crear realidades como Dios lo hace. Por su Palabra, Dios puso su Palabra en nuestra boca: hablemos los decretos de Dios, establezcamos decretos de Dios en nuestro matrimonio, comencemos a crear vida y a cambiar el curso que lleva nuestro matrimonio. 

Reflexionemos

¿Usas las Buenas Noticias para cambiar vidas?

Oro para que cada día crees realidades como Dios lo hace.