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¿Cuándo oró Jesús? Parte 2

Así como la comida nutre nuestro cuerpo, la oración nutre nuestra alma. Y, orar durante nuestras comidas combina los dos para que nuestro cuerpo y alma estén nutridos.

Jesús oró a la hora de comer

Las oraciones a la hora de la comida parecen estar pasando de moda, pero incluso una mirada rápida a los Evangelios mostrará a Jesús orando continuamente durante las comidas.

Jesús no solo oró para que Dios le proporcionara el pan de cada día, sino que le agradeció a Dios por la provisión antes de comerla. En Mateo 14:19 leemos esto:

«Luego ordenó a la multitud que se sentara en la hierba, y tomando los cinco panes y los dos pescados, miró al cielo y dijo una bendición. Luego partió los panes y se los dio a los discípulos, y los discípulos se los dieron. a las multitudes».

Jesús entiende que Dios es digno de agradecimiento por toda provisión, y él es intencional en agradecer a Dios por la provisión de algo que tu y yo a menudo damos por sentado —la comida. En algunas culturas, los cristianos oran al final de la comida, agradeciendo a Dios especialmente por las partes que más les gustaron. Eso también está bien.

La mayoría de los que leen esto viven en una cultura de abundancia. Incluso si no tienes mucho dinero, es probable que no pases un día sin comida para comer y agua para beber. ¿Cuándo fue la última vez que agradeciste a Dios por esa provisión «ordinaria»? Hay millones en el mundo que no saben si comerán hoy. Quizás agradecer a Dios a la hora de comer no debería ser tan superficial.

Jesús continuamente bendice las comidas «ordinarias», pero también bendijo las comidas especiales. En Marcos 14:23, leemos: «Y tomando una copa, y habiendo dado gracias, se la dio, y todos bebieron de ella». Y en Lucas 22:19: «Y tomando pan, y habiendo dado gracias, lo partió y se lo dio, diciendo: “Esto es mi cuerpo, que es entregado por ustedes. Hagan esto en memoria de mi.”»

¡No ores lo mismo cada vez! No seas rutinario con tus oraciones a la hora de comer.

También es posible que desees tener cuidado y ser considerado con lo que oras. A menudo, con buenas intenciones, se pronuncia la oración: «Señor, bendice este alimento para la nutrición de nuestros cuerpos». Pero, eso es exactamente lo que ya hizo. Es un parecido a orar: «Señor, moja esta agua».

Ora desde tu corazón. Agradece a Dios por esa comida en particular, agradece a Dios en particular por las personas que la prepararon y agradece a Dios por las personas con las que estás comiendo.

Reflexión:

1. ¿Comúnmente oras durante tus comidas de una manera significativa? Si no, hoy es un buen día para empezar.

2. ¿Le das gracias a Dios por sus provisiones diarias?