A través del lente divino.Sample

Puedes con todo.

Nuestras palabras son muy poderosas e importantes. Nos permiten expresar ideas y comunicarnos con los demás, pero debemos utilizar sabiamente ese poder. Así como tenemos cuidado al hablarle a un niño para que se sienta apreciado o para que no aprenda alguna palabra descompuesta de nosotros, de la misma manera debemos actuar cuando hablamos con nuestra mente. 

Lo que te dices a ti mismo es lo que tu mente absorbe y cree. Si dices “hoy luzco horrible”, es lo que tu mente creerá, y aunque otras personas te digan lo contrario, tú seguirás pensando igual ya que acondicionaste tu mente para verte así. 

Por eso es muy importante que elimines las palabras limitantes de tu vocabulario, sobre todo el “no puedo”. Si dices que no puedes, no podrás, pues ya te estás predisponiendo con esas palabras a no lograr lo que deseas.

En Filipenses 4:13 Pablo expresa que él puede con todo, pues Dios lo fortalece. Miles de cristianos y creyentes se han adueñado de este versículo y han llegado lejos en su vida por creerlo así, tú deberías hacer lo mismo.

¿Recuerdas de lo que hablamos ayer? Dios te da las fuerzas para sobrepasar cualquier adversidad, ahora necesitas creer que puedes hacerlo. Empieza reemplazando esas afirmaciones negativas por positivas: “Soy capaz, soy inteligente, soy brillante, luzco bien, soy importante, puedo con todo, voy a lograrlo…” ¡Wow, qué diferente es cuando nos hablamos con amor!

Moisés fue tartamudo, pero creyó que podía y logró dirigir e instruir a todo un pueblo.

David era un simple pastor de ovejas, pero creyó que podía y derrotó con solo una piedra y una onda a un gigante.

Daniel y sus amigos eran extranjeros y, al parecer, los únicos cristianos en una tierra pagana. Creyeron que podían y lograron sobresalir de buena manera entre todos los demás jóvenes de aquel lugar y agradaron a Dios.

Ester podía morir al entrar a hablar con el rey sin ser llamada, pero ella creyó que podía y por su valentía, salvó a su nación.

Todos estos personajes de la Biblia tienen un factor común, pudieron porque aceptaron y creyeron que Dios los ayudaría. Tú y yo también tenemos la oportunidad de lograr, con la fortaleza de nuestro Padre, todo lo que nos propongamos, sólo necesitamos creer que podemos.

 Leslie Ramírez