Blending a Family - Oficio religioso de 40 díasSample

  

Día 40

Oficio religioso

¿Viven Juntos y no Están Casados?

Nuestra pasión es que nosotros y nuestros hijos experimenten la “abundancia” de Dios.  Dios tiene grandes planes para nuestras familias. Su palabra tiene principios que hacen que las relaciones funcionen mejor.  En este punto, permítannos ser audaces y decirles que vivir juntos no es el diseño de Dios  

La Journal of Marriage and Family [Gaceta de Matrimonio y Familia] publicó un estudio que muestra que las parejas que vivían juntas antes del matrimonio tuvieron una tasa de divorcio más alta después de cinco años. Cuando no hay compromiso, nuestras relaciones solamente llegarán a cierto punto. 

La Biblia dice que el sexo antes del matrimonio va en contra de lo que Dios pretendía para el matrimonio. Entiendan que las familias no se ensamblarán en este entorno. 

1. Vivir juntos supone una falta de compromiso en la pareja, por cualquier razón. Las parejas en general no hablan sobre ese asunto, por miedo a que los perciban como que están “presionando” a la otra persona a realizar un compromiso. Sin compromiso, puede haber (y posiblemente haya) una falta de realización en la relación.

2. Cuando los hijos perciben una falta de compromiso entre los adultos, quizás se muestren vacilantes para conectarse con la relación. 

Conocimos a un hijo de 16 años que vio a su mamá llorando una noche. Estaba experimentando su quinta relación fracasada. Frustrado, él le dijo, “Mamá, cada vez que te deja un hombre, también me deja a mí.” Si nuestros hijos nos dicen cosas negativas sobre nuestra pareja, se arriesgan a que elijamos a nuestra pareja por sobre ellos. Es un riesgo demasiado grande. 

El matrimonio no es algo que se pueda “probar” para ver si funciona. El matrimonio fue creado por Dios y demuestra el amor perfecto entre Jesucristo y Su iglesia (nosotros). Un matrimonio próspero se trata de dos personas comprometidas a valorar y educar, amar y honrar, y proteger el corazón del otro. Crea una relación de mejores amigos, poniéndose uno a otro primero, antes de nuestros propios deseos. Los matrimonios que funcionan bien tienen parejas comprometidas a hacer que funcione. 

Creemos que la mayoría de los problemas en un matrimonio son espirituales. Si estamos construyendo nuestro hogar con los principios de Dios, nuestros hogares se llenarán de amor, paz y felicidad. 

Sugerencias:

Piense en las razones por las que viven juntos. (miedo, finanzas, soledad, etc.)

Los niños hacen lo que ven. ¿Querría que sus hijos siguieran su ejemplo?

Nuestra oración para ustedes:

Espíritu Santo, toma control de circunstancias negativas y trae vida y verdad a esta familia con el poder de palabras inspiradoras y que dan vida, ¡en el nombre de Jesús!