Blending a Family - Oficio religioso de 40 díasSample

  

Día 36

Oficio religioso 

El Poder de la Oración

Nuestro hijo escribió, “Recuerdo que, al principio, cuando nuestra nueva familia recién se estaba desarrollando, mi casa no siempre era un lugar pacífico. Las cosas se ponían muy intensas entre papá y mi nueva mamá, tan así que, a mí, que era un niño pequeño, me daba mucho miedo. Pensaba: “Otra vez lo mismo...” o incluso “No quiero que me griten”. Pero fue en esos momentos difíciles que mi nueva hermana mayor nos juntaba y nos llevaba a su habitación para abrazarnos fuerte. Ella sabía qué estaba pasando más que el resto de nosotros, y rezaba. Después nos decía una y otra vez que estaríamos bien. 

Recuerdo que pudimos atravesar esos momentos gracias a una oración.
Fue la oración lo que nos dio paz.
Fue la oración lo que nos dio fuerza.
Fue la oración lo que marcó la diferencia en mi mente”. —Jordan 

Hubo muchos días en nuestros primeros años en los que Paige y yo ya no teníamos fuerza emocional para seguir intentando construir nuestra familia. Muchas veces estuvimos listos para darnos por vencidos.  Sabíamos que nuestra lucha no era uno contra el otro, o contra nuestros hijos, o siquiera contra nuestros ex. Era principalmente nuestro adversario intentando dividirnos y dividir nuestra familia. 

El poder de la oración ha sido la fuerza sustentadora que nos trajo sabiduría, conocimiento, un cambio positivo en nuestros corazones, avance, y la victoria en nuestra Familia Ensamblada.  A menudo, los cristianos subestiman el poder de la oración. Dios es nuestro aliado. Él es altruista y cariñoso. Dice que somos sus hijos. Somos herederos de todo lo que le pertenece a Dios. Jesús decía que sus discípulos eran sus “amigos”. 

¡Dios valora su nueva familia! Quiere darles todo lo necesario para construir una Familia Ensamblada llena de amor. Pero solamente escuchamos a Dios y recibimos Sus instrucciones cuando pasamos tiempo comunicándonos con Él. Jesús les enseñó a sus discípulos a orar; les dio el “Padre Nuestro”, que describe los elementos de la adoración, el elogio, el dar gracias, el pedir en oración, el perdón y la protección. 

¡Nada es imposible con Dios! 

Sugerencias:

Cuando surjan conflictos entre cónyuges, eviten atacarse o culparse mutuamente y avancen en oración y con la Palabra de Dios contra su adversario. 

Nuestra oración para ustedes:

Padre, cuando esta familia se comunique contigo, escucha su llamado y envía Tu sabiduría para traerles paz y sanación. ¡Por Tu gloria en el Nombre de Jesús!