El Experimento NobleMuestra

¿Alguna vez has hecho una apuesta con alguien? Quizá dijiste que podías anotar un gol o, al menos, encestar una bola de papel en el cesto de basura desde el otro lado del salón. Si fallas, ¿qué es lo que más quieres escuchar? «¡Inténtalo de nuevo!». Todos queremos una segunda oportunidad que nos permita actuar como si nunca nos hubiéramos equivocado. Todos queremos poder empezar de cero. Uno de los mayores beneficios de poner nuestra fe en Jesús es que él nos da ese nuevo comienzo. Siempre que cometemos un error o fallamos, recibimos esa tan necesaria «segunda oportunidad». Cuando ponemos nuestra fe en Jesús, nos convertimos en una nueva creación. Eso significa que nuestro pasado ya no nos define. No tenemos que demostrar nuestro valor ni intentar ganar el amor de Dios. Simplemente podemos elegir ser una nueva persona en Cristo, ¡y eso es algo verdaderamente importante!

Hoy, tómate un tiempo para agradecer a Dios por darte un nuevo comienzo. Luego, pídele que te ayude a verte a ti mismo como él te ve: completamente amado y renovado.