Liderazgo basado en el temor del Señor

¿Cómo influye el temor del Señor en nuestro comportamiento? Probablemente nos lleva a orar, leer la Biblia, ir a la iglesia y servir en ella. Con suerte, también nos hace dar generosamente, amar a nuestro prójimo y tratar de ser el mejor cónyuge, amigo, padre, hijo o miembro de la sociedad que podamos ser.

Hoy aprendemos de Nehemías que el temor del Señor también debería influir en nuestro estilo de liderazgo. El temor del Señor debería hacernos comportarnos de manera diferente a nuestros predecesores (impíos). Aquellos que experimentan nuestro estilo de liderazgo, deben sentir que somos un tipo diferente de líder debido a nuestro temor del Señor. Esto no debe limitarse a la evangelización. Sino que también debe abarcar, como en el caso de Nehemías, diferencias prácticas en nuestro comportamiento que nos lleven a respetar a las personas que dirigimos. El temor del Señor hará que no queramos manipular o explotar a las personas que dirigimos. Querrá que reflexionemos sobre la difícil situación de aquellos a los que dirigimos y que revirtamos cualquier injusticia que hayan sufrido a manos de un mal liderazgo. El temor del Señor nos llevará a ser líderes activos y no pasivos.

Preguntas para la reflexión: ¿Influye el temor del Señor en mi estilo de liderazgo? ¿Existen diferencias prácticas entre mi liderazgo y el del líder que me precedió que puedan atribuirse a mi temor del Señor? ¿Respeto a las personas que dirijo porque temo al Señor? ¿Necesito arrepentirme en este aspecto? ¿He orado pidiendo la ayuda del Espíritu Santo en mi liderazgo?