La Voluntad De Dios Se Trata De DiosMuestra

La voluntad de Dios nunca carece de la provisión de Dios

El Dios de la «voluntad de Dios» es compasivo, afectuoso, intemporal y existe por sí mismo. Y también es el Dios que provee. Cuando Dios le habló a Moisés en la zarza ardiente, se reveló a Sí mismo y luego reveló su propósito de proveer para su pueblo. Y cuando sacó a su pueblo del cautiverio en Egipto, no salieron con las manos vacías.

¿Cuándo sucedió este «despojo»? Sucedió al amanecer el día después de la primera Pascua, cuando el primogénito de cada hogar egipcio yacía muerto.

Sorprendentemente, la petición de los israelitas no fue recibida con enojo o con burla por los egipcios, sino con favor. Mucho se ha dicho actualmente acerca del «favor» de Dios. Pero el sabor del favor actual, con frecuencia es de codicia carnal. ¿Cómo puedes diferenciar entre una petición hecha para ganancia personal y una hecha para la gloria de Dios? Es simple. ¿Cuál es el fin último de esa petición? ¿Es autosatisfacción o adoración? El despojo de los egipcios les permitió a los israelitas dejar la esclavitud y adorar libremente a Dios. Tenían el propósito de emprender un viaje para adorar a Dios sin importar lo lejos que los llevara. Moisés le llamó a su éxodo «camino de tres días» para adorar al Señor. Esa expresión significaba «un viaje importante con consecuencias formales», y el faraón lo sabía. La vida de los israelitas iba a mejorar, pero esa no era la meta. Adorar a Dios es la única meta que te mantiene en el juego cuando el desierto está caliente y el alimento es escaso.

Aunque eran esclavos en Egipto, los israelitas saldrían con grandes riquezas porque el Dios de la voluntad de Dios les iba a proveer. Ya hemos dicho que la voluntad de Dios va acompañada del poder de Dios. Esta es otra afirmación con la que puedes contar: La voluntad de Dios nunca carece de la provisión de Dios. Él prometió suplir todo lo que los israelitas podrían necesitar para su viaje, y lo hizo.

La Biblia usa la palabra hebrea para «despojos»; uno obtiene los despojos después de haber ganado una guerra. Pero los israelitas no libraron una batalla con los egipcios. Dios peleó la batalla por los israelitas y ellos recibieron los despojos. Dios les proveyó a ellos y te proveerá a ti.