Madres, ¡No Están Solas!Muestra

Eres más que una madre

Convertirme en madre fue lo mejor que pude experimentar. Quería ser la mejor madre que hubiera existido para mis hijos. Por eso moldeé mi identidad en torno a ser una madre increíble. Pero cada vez, a medida que pasaban los días con mi recién nacido, me daba cuenta de que no estaba a la altura de lo que había imaginado para mí y mis otros objetivos.

Ser madre es sólo un aspecto de lo que una es. Muchas madres luchan con su propia identidad mientras compaginan sus obligaciones parentales con sus aspiraciones personales y profesionales. Es esencial recordar quién eres realmente más allá de la maternidad. Si exploras el conocimiento de ti misma y persigues objetivos personales y profesionales más allá de la paternidad, descubrirás una vida más plena y orientada a un propósito. Jeremías 29:11 ofrece consuelo: "Porque yo conozco los planes que tengo para ustedes, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza". Este versículo pone de relieve el plan expansivo de Dios para nosotras como personas y como madres. Mereces tener aficiones y metas fuera de la vida de tus hijos. Creciste y cambiaste cuando te convertiste en madre, pero tu yo interior siguió siendo el mismo. Sólo tienes que volver a conectar con él y recordar tus valores, metas, motivaciones, creencias, propósito y visión en la vida.

En la vida se pueden tener otros objetivos además de ser madre. Establecer objetivos en distintos aspectos de tu vida allana el camino hacia una existencia más equilibrada y completa. Alinear tus pensamientos con una intención decidida impulsa tus logros.

También es fundamental darse cuenta de que los obstáculos y los retrasos sólo te conducen a tu verdadero propósito en el plan de Dios. Proverbios 19:21 reitera esta idea: "Muchos son los planes en el corazón de las personas, pero al final prevalecen los designios del Señor". Confiar en la intención de Dios nos permite superar los obstáculos con fe, sabiendo que su plan divino se manifestará a su debido tiempo. Aunque ser madre puede ser muy exigente, no debe apartarte de tu verdadera identidad. Establecer objetivos para tus relaciones, tu profesión y tu desarrollo personal son componentes importantes de una vida plena.

Aunque ser madre es ciertamente gratificante, aprovechar la oportunidad para perseguir otros objetivos y aspiraciones puede revitalizarte y ayudarte a ser una madre más inspirada y presente. Filipenses 4:13 sirve como pilar de fortaleza: "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece".

Con esta seguridad, encontrarás el valor para perseguir todos tus objetivos en la vida, confiando en que la fuerza de Dios te guiará a través del viaje de autodescubrimiento y crecimiento. ¡Haz lo que te gustaría hacer! Dios te mostrará el camino si tienes fe en Él.

No olvides nunca que eres más que una madre y que debes cuidar los demás aspectos de tu vida y de ti misma del mismo modo que quieres cuidar a tus hijos.