Resistiendo Hasta Alcanzar La Meta Muestra

¿Por qué?

El interrogante que surge siempre que nos vemos inmersos en circunstancias difíciles es: ¿Por qué me sucede a mí? Quizás es porque creemos, que al comprender las razones detrás de nuestra situación actual, tal vez eso nos ayude a enfrentar las circunstancias de manera más llevadera.

En numerosas ocasiones, he dirigido esta pregunta a Dios, sin embargo, la respuesta parece evadirme y sospecho que quizás no la obtenga, al menos no mientras transcurra mi vida terrenal. La verdad es que Dios no siempre ofrece una respuesta a ese cuestionamiento, tal vez porque entiende que nuestra mente limitada no será capaz de comprender plenamente los propósitos de una voluntad infinita como la suya.

Lo único que nos queda es aferrarnos a su Palabra que afirma: "Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados" (Romanos 8:28).

¿Podría considerarse esta una respuesta lo bastante convincente como para aceptar las adversidades y dolores que, en ocasiones, nos toca enfrentar?