40 Días de AdoraciónMuestra

A medida que nos adentramos en la etapa final del Viaje de 40 Días, la última oración simple que vamos a explorar es esta: “Jesús, dame sabiduría y guía”. ¡Esto es algo que oro diariamente, si no cada hora!

La vida puede ser tan confusa en ocasiones. A menudo, nuestra ansiedad surge al intentar controlar o prever el futuro, lo cual es un esfuerzo inútil. Debemos ser lo más responsables posible, pero en última instancia, Dios es Aquel que tiene el futuro en Sus manos. Necesitamos dirección divina con regularidad para tomar decisiones sabias y llenas de fe. Como dice Proverbios 3:5–6: “Confía en el Señor con todo tu corazón; no dependas de tu propio entendimiento. Busca su voluntad en todo lo que hagas, y él te mostrará cuál camino tomar”.

Por eso, tus mañanas dedicadas al Señor son invaluables. Comenzar tu día rindiéndote a Él te ayuda a procesar y controlar tus preocupaciones sobre el futuro. Dios tiene un camino para que lo sigas, y al confiar y buscarlo, Él te lo revela.

El camino de Dios conduce a la paz. Vale la pena meditar en esto. Cuando recuerdas que el futuro está firmemente en Sus manos y que puedes confiar en Él para guiarte por el camino correcto, encuentras descanso y paz. Nuevamente, debes ser responsable, hacer planes y trabajar duro. También hay gozo y paz en eso. Pero no tienes que cargar con el peso del futuro. No tienes que preocuparte por cada escenario posible ni estresarte por tu incapacidad para preverlo y controlarlo todo. En cambio, puedes confiar en Dios, buscar Su voluntad y caminar por el camino que Él te establece, sabiendo que incluso si tomas un rumbo equivocado o tropiezas en el camino, Él estará contigo, guiándote continuamente.

Al orar esta mañana, busca la sabiduría y dirección de Dios. Pídele que te guíe por Su camino y te conduzca a Su paz. Jeremías 29:11 dice famosamente que los planes de Dios “son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza”. No sabes qué depara el futuro, pero conoces a Aquel que tiene el futuro en Sus manos. Sus planes para ti son buenos, y nada puede impedir que se cumplan.

Preguntas para Reflexionar

1. ¿Puedes recordar un momento en el que te sentiste ansioso acerca de una decisión y recurriste a Dios en busca de orientación? ¿Qué sucedió?
2. ¿Cómo te ayuda saber que Dios tiene buenos planes para tu vida a tener paz en medio de la confusión de la vida?
3. ¿En qué áreas de tu vida necesitas la sabiduría y guía de Dios hoy? ¿Lo estás buscando y confiando en Él en esas áreas?