Gloria en Nuestros Sufrimientos.Muestra

Día 7: Perdón.

Sé que esto es difícil incluso de leer, y mucho mas de hacer. Te reto a que sigas leyendo. Has llegado hasta aquí; ¡Puedes hacerlo! Sé que algunos de ustedes llevan consigo un equipaje que incluye dolor, traición, ira, pérdida y dolor por lo que la gente les ha hecho. Créeme, sé que te sientes justificado en tu ira, pero lo que no te das cuenta es que esas cosas te están debilitando para seguir adelante con Dios. Esas cosas están obstaculizando tu caminar con Dios. No puedes seguir adelante y seguir llevando el pasado contigo. ¡Deja que tu mente y tu corazón sean transformados por El! Hablaré esta próxima revelación con tal autoridad que sé que me liberará de esa mentalidad y sé que Dios quiere liberarte a ti también. Como puedes imaginar, mi ira hacia muchas personas y muchas cosas estaba justificada en todos los sentidos.

En algún momento, tendrás que dejar que lo que Jesús hizo por ti en la cruz sea más grande que lo que alguien te hizo.

Tengo que dejar que lo que Jesús hizo por mí en la Cruz sea más grande que lo que me hicieron mis abusadores. Una noche estaba exhausta y decidí dar una vuelta y adorar en mi auto. En mi camino de regreso a casa, el Señor me retó y puso en mi corazón el perdonar a todos aquellos que me han lastimado. Me detuve porque sabía que iba a ser difícil. Me hizo nombrar a cada abusador por su nombre y perdonarlos a uno por uno, desde el principio, a los cinco años, hasta el final. Por ejemplo, era: “Perdono a __________ por hacerme __________”. Fue extremadamente difícil, y cuando llegó la parte de perdonar a los hombres que me habían comprado, me puse a llorar. Después mi alma se sintió más ligera, no me di cuenta del peso que llevaba hasta que Dios me pidió que lo dejara.

Jesús era 100% hombre y 100% Dios, perfecto y sin pecado. Él tomó todos nuestros pecados y transgresiones y soportó la muerte dolorosa más inimaginable. La carne de su espalda fue desgarrada por 40 latigazos. Luego cargó con una pesada cruz, mientras estaba herido y magullado. En esa misma cruz fue clavado en sus manos y pies. Una corona de espinas en su cabeza, su sangre derramada por ti y por mí. Los guardias asignados para torturarlo le escupieron y se burlaron de Jesús. ¿Cómo respondió Jesús a esto?

Lucas 23:34 “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”.

El perdón no significa que tengamos que volver a confiar en alguien. Simplemente significa que no podemos guardar rencor porque, esencialmente, es como veneno en nuestros corazones. Dios nos ha llamado a vivir una vida de libertad y no de ira o amargura.

¡Llegaste hasta el final! Oro para que puedas utilizar estos versículos y herramientas de la Biblia para caminar en libertad, gozo y paz.

Isaías 53:5 “Pero El fue traspasado por nuestras transgresiones, molido por nuestras iniquidades. El castigo, por nuestra paz, cayo sobre El, y por sus heridas hemos sido sanados."