La Armadura de DiosEjemplo

Reconociendo el engaño

Leer: 1 Juan 4:4–6

EOAO: 1 Juan 4:6

Nosotros somos de Dios. El que conoce a Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye. Por esto conocemos cuál es el espíritu de la verdad y cuál es el espíritu del error.

En el texto:

Para saber lo que es verdad, debemos conocer la Palabra de Dios. La verdad sólo se puede encontrar en Dios, Aquel que es la verdad en Sí mismo. La verdad de Dios debe guardar nuestras vidas. Vestir el cinturón de la verdad todos los días es muy importante cuando salimos al mundo y nos enfrentamos a un enemigo que ataca con mentiras.

El espíritu del engaño siempre ha estado en el mundo, desde que la serpiente le habló a Eva en el jardín. La engañó cuestionando las palabras de Dios y haciéndola dudar si Dios realmente quería lo mejor para su vida. Si no estamos cimentadas en la Palabra de Dios, convirtiéndola en el fundamento de nuestra vida y permitiéndole penetrar nuestra mente y corazón, seremos susceptibles a las mareas cambiantes de la opinión pública y perderemos el equilibrio.

Es muy importante a quién permitimos que hable en nuestras vidas. A quién escuchamos es a quién permitimos que influya en nosotra s. Cuando tenemos una relación cercana con Dios y sabemos lo que Él ha dicho, somos capaces de reconocer la voz de la verdad y distinguirla de la voz de mentira. Esto es crucial en nuestro viaje espiritual cuando enfrentamos los ataques del enemigo que trata de engañarnos con mentiras y falsas enseñanzas. Cuando estamos arraigadas en la verdad de Dios, podemos reconocer el espíritu de verdad y rechazar el espíritu de falsedad.

Oración:

Querido Señor Jesús, ayúdame a escuchar Tu voz y obedecerla. Dame discernimiento y enséñame a escuchar lo que dices y creerlo de todo corazón. Ayúdame a bloquear cualquier mentira que el enemigo apunte a mi corazón y mente. Amén.