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Nuestra conexión con Dios puede ser un poco complicada, sobre todo porque no lo vemos visiblemente. Es más probable que confiemos en lo que podemos ver. Si somos sinceros acerca de nuestra fe, a veces no ver a Dios hace que sea difícil sentir realmente que nos estamos conectando con Dios. Nos hacemos estas preguntas: ¿Cómo sabemos que Dios nos escucha? ¿Alguna vez nos responderá Dios? ¿Cómo sabemos que Dios está realmente ahí? Bueno, aquí tenemos la promesa de que si buscamos a Dios de todo corazón, lo encontraremos.

Si quieres ver a Dios obrando y escucharlo, a veces tienes que encontrar un lugar tranquilo y dejar espacio para Dios. De hecho, esto es algo que los cristianos han practicado durante mucho tiempo. Sentarte en silencio y reflexionar sobre quién es Dios o cómo actúa en tu vida puede ser una forma de buscar a Dios. También puedes sumergirte en la Biblia y pedirle a Dios que te hable a través de sus relatos y su sabiduría. Puede que no veas ni oigas a Dios de forma visible o audible, pero cuando buscas a Dios con intención, te das cuenta de que Dios está trabajando en tu vida y a tu alrededor todo el tiempo.

Hoy, tómate tiempo para buscar a Dios de esa manera. Practica escuchar a Dios a través de los pasajes bíblicos y busca a Dios en el mundo que te rodea.