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Cómo sobrevivir a la espera con valentía

Las demoras continuas pueden ser desalentadoras, en especial cuando las circunstancias no salen como uno quiere o las cargas se vuelven demasiado pesadas.

Lo más probable es que usted haya experimentado ocasiones desgarradoras, decepciones devastadoras que le han robado hasta la última de sus fuerzas y determinación. Los días, las semanas, los meses y, a veces, los años pasan sin ninguna respuesta a sus oraciones. La enfermedad, las dificultades económicas, los conflictos, la soledad, la incertidumbre o la necesidad persisten. Usted lucha, sintiendo la tentación abrumadora de ceder a la desesperación total y volver a caer en hábitos destructivos.

No hay nada que pueda sumirle en la oscuridad de la desesperación, tanto como una prolongada temporada de espera. Pero es entonces cuando usted debe determinar esperar en el Señor con valentía. La cualidad que nos permite soportar el sufrimiento, la oposición y los desafíos de la vida con una confianza firme e intrépida en la provisión y protección de Dios es la valentía. Y es nuestra valentía la que se ensancha y refina en nuestros momentos más oscuros y dolorosos.

La valentía es un estado mental del todo esencial para que los hijos de Dios triunfen. Cuando todo se ve sombrío y no hay esperanza a la vista, seguimos confiando sin temor en que el Padre tiene el control total. No nos rendimos ni renunciamos gracias a la fe que tenemos en que el Señor sigue siendo bueno y tiene planes maravillosos para nuestras vidas. Estamos dispuestos a enfrentar la adversidad y renunciar a las buenas oportunidades que ofrecen consuelo temporal, para poder aprovechar lo mejor que el Señor ha pensado para nosotros.

Entonces, ¿cómo puede usted mantener el rumbo con los propósitos de Dios para su vida cuando todo parece oscuro y se siente desolado? ¿Cómo puede aferrarse con valentía a la verdad de que Dios cuidará de usted y le guiará? Recuerde que...

1. Dios está con usted. Él sabe con exactitud dónde está y a qué se enfrenta, y está caminando con usted, proveyéndole y protegiéndole a lo largo del camino.
2. Él tiene un propósito importante para los tiempos de adversidad que usted enfrente. Para hacerle su representante útil y efectivo, el Padre Celestial le capacita en el fuego de la adversidad. ¿Por qué? Porque no hay nada, como el dolor, que profundice su comprensión, despierte su compasión por los demás y le muestre lo que en realidad es importante.
3. Está en una batalla espiritual (Efesios 6.12). Tiene un enemigo real que ataca la esencia de lo que usted es. ¿Cómo lo hace? A través de lo que piensa y cree (2 Corintios 10.4, 5). No hay momento más efectivo para que el diablo le desanime y atormente, que cuando está esperando en Dios. Él sabe con precisión cómo identificar las áreas más dolorosas y vulnerables de su vida y llevarle a la desesperación. Pero por medio del ejemplo del Señor Jesús en Mateo 4, usted puede resistir las desalentadoras mentiras del diablo con valentía y la poderosa verdad de las Sagradas Escrituras.
4. Debe expresar agradecimiento a Dios, sin importar lo que suceda (1 Tesalonicenses 5.18). Debe dar gracias en cada situación y demora que enfrente, confiando con valentía en Aquel que al final le sacará adelante.

Ánimo: los tiempos de espera y sufrimiento tienen un límite. Solo continuarán mientras sean necesarios para que Dios cumpla sus propósitos en usted (Salmo 138.8). Si se mantiene valiente y fiel, confiando en que Dios le guiará en medio de los tiempos difíciles, entonces Él hará cosas asombrosas en y a través de usted. Y Él le llevará de la desesperación al lugar maravilloso donde se cumplen todas sus promesas para usted.