La llenura del Espíritu Santo

Hechos 1:8 dice: “Pero quiero que sepan que el Espíritu Santo vendrá sobre ustedes, y que recibirán poder para hablar de mí en Jerusalén, en todo el territorio de Judea y de Samaria, y también en los lugares más lejanos del mundo". Nos encontramos con un hecho sumamente importante para la Iglesia de Jesucristo, un hecho que marcó la historia del Evangelio, un antes y un después en la vida de los seguidores de Jesús. El Señor había resucitado como lo había prometido (Mateo 17:22-23), y Sus discípulos le vieron resucitado pero no por mucho tiempo. Antes de que el Señor se elevara entre las nubes, les habló Sus últimas palabras, palabras que marcarían las vidas de Sus discípulos para siempre. La promesa del Padre del Maravilloso Espíritu Santo: El bautismo del Espíritu de Poder. La pregunta que puede brotar es: ¿Por qué debían esperar la llenura del Espíritu Santo? Podemos ver tres razones:

• Primero: “Cuando venga el Consejero, el Espíritu de la verdad, que les enviaré de parte del Padre, él dará testimonio de mí" (Juan‬ ‭15‬:‭26).‬ Es una promesa del Padre disponible para todos Sus hijos. La descripción que nos da Jesús acerca del Espíritu Santo lo hace alguien indispensable para la vida de todo cristiano.
• Segundo: Jesús seguiría estando con ellos todos los días hasta el fin, no de forma física porque iba a estar a la diestra del Padre pero sí a través del Espíritu Santo. Cristo sigue estando con la Iglesia hoy en día por medio del Espíritu Santo.
• Tercero: Porque la tarea es grande para todos los discípulos de Cristo.

Aquel cristiano que entiende que el Evangelio es Poder de Dios va a esperar, buscar y ser lleno del Poder del Espíritu Santo para llevar adelante la tarea que nuestro Señor Jesucristo nos dejó encomendada: La gran comisión (Mateo 28:18-20). Esta misión no les corresponde a otros hacerla sino que tú y yo tenemos el gran privilegio de llevarla a cabo. Debería incomodarnos que aproximadamente 680 millones de personas en el mundo todavía no han escuchado del Evangelio de Cristo. Tenemos mucho trabajo por hacer. Es por eso que necesitamos el Poder del Espíritu Santo para compartir las Buenas Nuevas hasta lo último de la Tierra.

Reflexiona/Acciona

1- ¿Conoces a alguna persona que no conozca de Jesucristo?

2- El bautismo del Espíritu Santo nos llena de Poder para ser testigos, ¿eres un testigo fiel?

3- Toma unos minutos y pídele a Dios que te llene de Su poder para que puedas hablar de Su Evangelio con pasión y denuedo.