El LlamadoMuestra

Hoy quiero hablarte acerca de las habilidades especiales que Dios te ha dado. En Éxodo 31:6, se nos muestra un ejemplo claro: "También he designado personalmente a Aholiab, hijo de Ahisamac, de la tribu de Dan, para que sea su ayudante. Además, he dotado de habilidades especiales a todos los expertos artesanos para que puedan hacer todo lo que te he mandado construir".

Dios personalmente ha dotado a cada uno de nosotros con habilidades especiales. Él ha creado en ti talentos y capacidades únicas que te distinguen de los demás. Estas habilidades no son accidentales ni aleatorias, sino que son un regalo divino con un propósito específico.

Te invito a reflexionar sobre las habilidades especiales que Dios te ha dado. Examina tus talentos en el campo profesional, en el hogar, en tus relaciones o cualquier otra área de tu vida. Reconoce que cada una de estas habilidades es una oportunidad para glorificar a Dios y bendecir a los demás.

Es importante que entiendas que tus habilidades no son solo para tu propio beneficio, sino que Dios las ha depositado en ti para que las utilices en Su servicio y para cumplir Su propósito en tu vida. Puede ser que tengas habilidades para la enseñanza, la escritura, el liderazgo, la creatividad, la administración o cualquier otra área. Independientemente de cuál sea tu talento, Dios te llama a usarlo para Su gloria.

No te conformes con simplemente tener estas habilidades, sino comprométete a desarrollarlas y mejorarlas. Dedica tiempo y esfuerzo en capacitarte y crecer en tus habilidades. Esto implica adquirir conocimientos, practicar, recibir mentoría y buscar oportunidades para aplicar tus habilidades en diferentes contextos.

Al desarrollar tus habilidades, te vuelves más efectivo/a en el servicio a Dios y a los demás. Puedes marcar la diferencia en tu entorno, impactar vidas y ser una luz en medio de la oscuridad. No subestimes el poder que tienes cuando usas tus habilidades para el bien de los demás.

Recuerda, el propósito de tus habilidades es más grande que el éxito personal o el reconocimiento. Es llevar a cabo la obra de Dios en el mundo y ser un canal de Su amor y gracia. Permítele a Él guiar tus pasos y utilizar tus habilidades para Su gloria.

Te animo a que reflexiones sobre las habilidades especiales que Dios te ha dado. Reconoce su valor y potencial en tu vida. Comprométete a desarrollar y mejorar tus habilidades, creciendo en ellas para cumplir el propósito de Dios en tu vida.

Preguntas de reflexión:

• ¿Cuáles son las habilidades especiales que Dios te ha dado?
• ¿Cómo puedes usar esas habilidades para cumplir el propósito de Dios en tu vida y ser una bendición para los demás?

Recuerda que el llamado de Dios no se limita a roles específicos dentro de la iglesia, sino que abarca todas las áreas de tu vida. Busca la guía de Dios y aprovecha las oportunidades que tienes para servir y marcar la diferencia en el mundo, utilizando tus dones, talentos y habilidades para honrar a Dios y amar a tu prójimo.